Elegido: Acuérdate del Evangelio todos los díasMuestra

Si nos acordamos del Evangelio cada mañana, nos despertaremos y viviremos con alegría agradecidos de que la batalla más dura que vamos a enfrentar hoy ya ha sido ganada.



¿Qué tan diferente sería su vida si usted predicara el Evangelio a su propio corazón más regularmente?



Hay docenas de maneras en que el Evangelio impacta positivamente y moldea nuestra vida diaria. Todos necesitamos recordatorios regulares de estos beneficios, y necesitamos el poder de Dios para captarlos más.



Demasiados creyentes piensan que las buenas noticias son viejas noticias. No hemos escuchado mucho el Evangelio; no lo hemos escuchado lo suficiente. Como muchas de las formas de un hermoso diamante, el Evangelio tiene una belleza infinita que nunca puede ser agotada. Cuanto más nos fijemos en el Evangelio, más fuertes y seguros estaremos de nuestra fe.



Necesitamos recordatorios regulares de todo lo que Dios ha hecho por nosotros en el Evangelio, porque el Evangelio alimenta y motiva nuestro deseo de obedecer a Dios y servirle. Cuando vemos cuánto ha hecho, cuánto nos ha dado en su Hijo, no podemos dejar de ser cambiados y motivados para darle toda nuestra vida. E incluso mientras somos pecadores débiles y frágiles que luchan por seguir a un Salvador perfecto, el Evangelio nos recuerda lo amados que somos y lo mucho que Dios está trabajando en nosotros para ayudarnos a seguirlo a Él.



No hay mayor necesidad en su vida cristiana que recordar regularmente a su propio corazón la verdad del Evangelio.