FILEMÓN 1:8-19
FILEMÓN 1:8-19 RV2020
Por eso, aunque tengo mucha libertad en Cristo para ordenarte lo que conviene, prefiero rogártelo y apelar a tu amor. Yo, Pablo, ya anciano, y ahora, además, preso por causa de Jesucristo, te ruego por mi hijo Onésimo, a quien engendré en mis prisiones. Él, en otro tiempo te fue inútil, pero ahora a ti y a mí nos es útil. Te lo envío de nuevo. Tú, pues, recíbelo como a mí mismo. Yo quisiera retenerlo conmigo, para que en lugar tuyo me sirviera en mis prisiones por causa del evangelio. Pero nada quise hacer sin tu consentimiento, para que tu favor no sea por obligación, sino por tu propia voluntad. Tal vez por eso Onésimo se alejó de ti por algún tiempo, para que ahora lo recibas para siempre, no ya como esclavo, sino como más que esclavo, como hermano amado, mayormente para mí, pero cuánto más para ti, tanto en la carne como en el Señor. Así que, si me tienes por compañero, recíbelo como a mí mismo. Y si te causó algún daño, o si te debe algo, cárgalo a mi cuenta. Yo, Pablo, lo escribo de mi puño y letra: yo te lo pagaré (por no decir que tú mismo estás en deuda conmigo).


