Tráigalos de Regreso: Devociones de Tiempo de Gracia 预览

El Corazón de Dios: La paciencia “La venganza es un plato que se sirve mejor frío”. Esas palabras aparecieron primero en la novela Matilde, del autor francés Marie Joseph Eugène Sue y han sido citadas con aprobación en películas como El Padrino, Star Trek II, y Kill Bill. El punto es que la venganza va a ser más efectiva si se va despacio, pensándola y planeándola. También Dios mismo dice que es “lento”. Sin embargo, la lentitud no está en sus procesos cerebrales o en sus fantasías de venganza, sino en su carácter; él es paciente con los pecadores necios como usted y yo, nos da tiempo para escuchar el diagnóstico de lo que realmente está mal con nosotros y para que escuchemos lo que él ha hecho al respecto. “Misericordioso y clemente es Jehová; lento para la ira y grande en misericordia” (Salmo 103:8). Las personas de temperamento irascible por lo general no piensan mucho antes de actuar; las personas impulsivas generalmente no le dedican mucho tiempo a la planeación. Su Dios va lento porque es paciente y quiere llevar a su cielo a tantos como pueda. El día de la rendición de cuentas ciertamente va a llegar; si usted está leyendo esto, aún hay tiempo para traerlos de regreso.El Corazón de Dios: La paciencia “La venganza es un plato que se sirve mejor frío”. Esas palabras aparecieron primero en la novela Matilde, del autor francés Marie Joseph Eugène Sue y han sido citadas con aprobación en películas como El Padrino, Star Trek II, y Kill Bill. El punto es que la venganza va a ser más efectiva si se va despacio, pensándola y planeándola. También Dios mismo dice que es “lento”. Sin embargo, la lentitud no está en sus procesos cerebrales o en sus fantasías de venganza, sino en su carácter; él es paciente con los pecadores necios como usted y yo, nos da tiempo para escuchar el diagnóstico de lo que realmente está mal con nosotros y para que escuchemos lo que él ha hecho al respecto. “Misericordioso y clemente es Jehová; lento para la ira y grande en misericordia” (Salmo 103:8). Las personas de temperamento irascible por lo general no piensan mucho antes de actuar; las personas impulsivas generalmente no le dedican mucho tiempo a la planeación. Su Dios va lento porque es paciente y quiere llevar a su cielo a tantos como pueda. El día de la rendición de cuentas ciertamente va a llegar; si usted está leyendo esto, aún hay tiempo para traerlos de regreso.