Florecer en La Adversidad预览

Después de la tormenta
En esta etapa existe el duelo por la pérdida, pero en medio de eso podemos reconstruir nuestra vida y comenzar de cero, como hijas de Dios entendemos que todo obra para bien para los que aman al Señor.
Busca intensamente su reino: En este punto no hablo de una nueva pareja, hablo de quién eres y a quién te aferras después del cambio. Dice un dicho: "Después de la tormenta viene la calma" pero dices “¡qué bárbara tormenta me sobrevino, parece un huracán categoría 5 no dejó nada al paso!”. No es nada fácil reconstruir, pero en los brazos del Padre estarás segura, establecer una relación íntima con el Espíritu Santo es tu primer paso y el más importante. Lleva esos sentimientos y duelo que no entiendes a los pies de Jesús, todo, y digo TODO podemos superar agarradas del Señor.
¿En dónde estás poniendo tu mirada?
Oremos juntas:
Señor, ayúdame a aferrarme a ti, amarte en tiempos difíciles y que tu presencia llene todo mi ser, no busco vivir bajo mis dominios, anhelo depender de ti hoy y siempre.