Día Por Día Hasta Llegar a NavidadMuestra

Soltar para avanzar

Saludos, un gusto.

Hoy reflexionamos sobre soltar para caminar con ligereza. Soltar no significa renunciar sin sentido sino elegir dejar atrás lo que nos ata para poder recibir lo nuevo que Dios quiere dar. Cuando liberamos rencores, hábitos dañinos o expectativas irreales, creamos espacio para la sanidad, la creatividad y la paz.

Isaías nos invita a olvidar lo que quedó atrás porque Dios hace algo nuevo; la mirada no debe quedarse fija en lo pasado. Pablo declara que pierde lo que le pesa para avanzar hacia la meta, mostrando que el seguimiento implica renuncia dirigida. Jesús ofrece descanso a los cansados y carga ligera a los que le siguen, señalando que la vida en él libera del peso insostenible. Llamar a tomar la cruz en Lucas implica renunciar a seguridades para seguir a Jesús con corazón dispuesto. El salmista pide un corazón nuevo, recordándonos que soltar suele comenzar en el interior antes de mostrarse en acciones.

Soltar es un proceso que combina discernimiento y prácticas concretas. No siempre se logra de una vez; a veces requiere pasos pequeños y repetidos. Primero, reconoce qué te ata: miedo, orgullo, resentimiento, expectativas sociales o proyectos que ya no sirven. Segundo, entiende que soltar no te deja vacío: es preparación para recibir. Tercero, busca apoyo espiritual y práctico: confiesa, ora, comparte con alguien de confianza y crea rutinas que sustituyan el viejo peso por hábitos sanos.

• Identificar el peso: Toma cinco minutos para escribir aquello que sientes que te agobia o que te impide avanzar. Sé específico.
• Elegir un primer acto de liberación: Decide una acción pequeña y concreta para empezar a soltar: enviar un mensaje de perdón, dejar de revisar algo que te angustia, eliminar una suscripción o cambiar una rutina.
• Sustitución positiva: Planea una práctica que ocupe el lugar del peso soltado: tiempo de lectura, caminar, orar, reunirte con alguien, servicio puntual.

Práctica para el día

• Lectura breve: Lee (Isaías 43:18-19 y Filipenses 3:13-14)
• Ejercicio de escritura: Escribe en una hoja lo que decides soltar hoy y quémala simbólicamente o rómpela como acto de renuncia.
• Oración de entrega: Haz una oración breve pidiendo a Dios ayuda para soltar y para recibir claridad en lo que viene.

Preguntas

1. ¿Qué peso concreto necesito soltar hoy?
2. ¿Qué paso pequeño puedo dar ahora para empezar a liberarme?
3. ¿A quién puedo pedir apoyo en este proceso?