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Día 5: La obra maestra de Dios en el cielo

Aunque leer Génesis 1 de una sola vez puede parecer sencillo, es importante hacer una pausa y meditar en la magnitud de las acciones que Dios tomó para crear un mundo solo para que nosotros viviéramos en él. Cada detalle que vemos, en el que vivimos y sobre el que construimos, fue creado con un propósito por Él. Me imagino que hay mucho más que no sabemos, y que muchos de nosotros todavía estamos buscando entender más a fondo. Esto me trae a la mente a David, a quien a menudo se le llama un hombre conforme al corazón de Dios.

En el Salmo 8, David reflexiona sobre la creación de Dios, reconociendo su belleza mientras expresa un sentimiento de indignidad por el honor que Dios le concedió. David humildemente reconoce que no merece tal reconocimiento en el gran esquema de todo lo que Dios ha hecho. Nosotros también podemos sentir lo mismo cuando experimentamos la naturaleza.

Mientras participas en este devocional, ruego que encuentres la inspiración para reconocer, apreciar y celebrar las creaciones de Dios. También espero que llegues a verte a ti mismo como una de Sus creaciones especiales, si es que aún no te ves de esa manera.

Ponte a pensar:

Dios no solo creó el cielo con luces para nuestro disfrute, sino que también agregó estrellas que más tarde simbolizarían Su promesa a Abraham: que sus descendientes serían tan numerosos como las estrellas en el cielo. La obra de Dios tiene muchas capas y sigue hablándonos a través de lo que Él creó.