Protege Tu Amor Como Si Estuvieras en GuerraMuestra

La lámpara encendida: fe y oración como escudo

“Tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno.” (Efesios 6:16, RVR1960)

Reflexión
La lámpara encendida simboliza la fe y la oración constante. Es un recordatorio de que nuestra pasión por Dios necesita luz permanente, especialmente en medio de la oscuridad de la batalla espiritual. La fe actúa como escudo y la oración como combustible que mantiene viva la llama interior. Sin estas herramientas, el corazón se vuelve vulnerable y la pasión se apaga lentamente.

Mantener la lámpara encendida requiere disciplina, vigilancia y entrega diaria. Cada oración es un soplo de vida que aviva la fe y protege tu primer amor. Cada acto de confianza fortalece el corazón, permitiendo que incluso en medio de pruebas y tentaciones, la luz del amor divino brille con fuerza. Hoy, tu tarea es alimentar esa luz y permanecer vigilante.

Aplicación práctica
Dedica 10 minutos a orar por tu fe y tu pasión. Visualiza tu corazón como una lámpara que se mantiene encendida por la gracia y protección de Dios.

Oración
Señor, mantén mi lámpara encendida. Que la fe y la oración protejan mi corazón y mantengan mi primer amor vivo y fuerte. Amén.