Amar como Dios AmaMuestra

Amar como mandamiento de Jesús

El amor no es una sugerencia en la vida cristiana, es un mandamiento directo de Jesús. Él no solo nos enseñó con palabras, sino que lo modeló con Su propia vida, al amar hasta lo más profundo y entregar todo por nosotros en la cruz.

El amor que Jesús nos pide no es opcional ni condicionado a nuestras emociones. Es la marca que nos distingue como Sus discípulos. Cuando amamos como Él nos amó, damos al mundo una evidencia clara de que pertenecemos a Cristo.

Además, Jesús nos recuerda que amar a Dios y amar al prójimo son inseparables. No podemos decir que amamos a Dios si no estamos dispuestos a amar a las personas que Él ha puesto a nuestro alrededor. Este amor se traduce en acciones concretas: servir, perdonar, escuchar, acompañar y poner las necesidades del otro por encima de las nuestras.

Aplicación:
Hoy pregúntate: ¿Estoy obedeciendo este mandamiento de Jesús en mi vida diaria? ¿El amor es realmente lo que distingue mi caminar como discípulo? Piensa en una persona a quien puedas demostrar amor de manera práctica hoy, ya sea con palabras de ánimo, un gesto de bondad o un acto de servicio.