“ENCIENDE LA CHISPA”

Hay momentos en que el fuego de nuestra fe comienza a apagarse: el cansancio, las rutinas, las heridas o la indiferencia lo van apagando lentamente. Pero Pablo, en esta carta a Timoteo, le recuerda algo importante: ¡la llama se puede reavivar!

Dios ya encendió algo dentro de ti. No necesitas esperar algo externo para comenzar. Solo necesitas soplar con fe, alimentar ese fuego, decidir buscar a Dios con intención. Este devocional no será uno más, será una oportunidad para que la chispa que aún vive en tu interior se convierta nuevamente en una llama ardiente por el Señor.

No importa en qué punto estés hoy: aún hay fuego en ti. Dios quiere encenderlo otra vez.

Aplicación práctica

Hoy busca un lugar tranquilo y escribe tres cosas que apagaron tu pasión por Dios este último tiempo, y junto a ellas, escribe tres cosas que puedes hacer para volver a acercarte al fuego de su presencia. Luego, ora entregando todo eso a Dios.

Oración

Señor, reconozco que a veces mi fuego se ha apagado. Pero hoy decido buscarte con sinceridad. Sopla con tu Espíritu sobre mi vida, y enciende en mí una pasión verdadera por ti. Hazme recordar lo que pusiste dentro de mí. Amén.