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Día 15: Dios me guía

Historia
¿Has jugado alguna vez a caminar con los ojos cerrados mientras alguien más te dice por dónde ir?
Es difícil confiar, ¿verdad?
No ves nada. No sabes si vas a chocar con algo. Solo escuchas una voz.

Así es a veces nuestra vida:
No vemos el futuro.
No entendemos por qué pasa lo que pasa.
Pero podemos seguir la voz de Dios.
Porque Él no nos guía para perdernos…
sino para llevarnos al mejor lugar.

📖 Versículo clave

“Te instruiré, te mostraré el camino que debes seguir; te daré consejos y velaré por ti.”
— Salmo 32:8 (NVI)

Explicación
Este versículo es como si Dios nos dijera:
“No te preocupes. Yo te voy a decir por dónde. No tienes que saberlo todo. Solo confía en mí.”

Él no es un guía impaciente.
No se cansa de repetirnos la dirección.
Y cuando nos desviamos… nos llama de vuelta.
Con amor. Sin mapas complicados.

Aplicación práctica
Piensa en una decisión que tengas que tomar esta semana:
— ¿Con quién jugar?
— ¿Decir la verdad aunque dé pena?
— ¿Pedir perdón a alguien?

Pídele a Dios:
“Guíame, muéstrame lo que tú quieres que haga.”

🙏 Oración familiar
Dios, a veces me siento perdido.
No sé qué hacer, qué decir, qué decisión tomar.
Pero hoy quiero confiar en que tú me guías.
Muéstrame el camino, aunque yo no lo vea todo.
Hazme sensible a tu voz.
Y dame el valor de seguirte, aun cuando otros no lo hagan.
Amén.

🧭 Actividad simple
Hagan juntos un mini “mapa del día”:
— Dibuja lo que ya hiciste hoy.
— Luego escribe: “Dios, guíame en lo que falta”.
Pueden guardar ese dibujo como recordatorio de que Él está guiando cada paso.