Fe Que Actúa: Un Llamado a La AutenticidadMuestra

Muéstrame tu fe… con tus obras
"Pero alguno dirá: Tú tienes fe, y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin tus obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras" (Santiago 2:18 RVR1960).
La fe se ve, no solo se dice.
Santiago plantea un reto contundente: si la fe no puede verse, ¿realmente está viva? No se trata de competir entre “fe” y “obras”, sino de mostrar que una es el reflejo natural de la otra.
Una fe que permanece oculta, que no cambia nada en nuestra forma de vivir, de servir, de decidir, es una fe incompleta, ilusoria.
Incluso los demonios creen en Dios —dice Santiago en el versículo 19—, pero su fe no los transforma. Por eso, la fe auténtica no es mera creencia doctrinal, ni siquiera un asentimiento emocional, sino una confianza activa que impulsa al servicio, al perdón, a la obediencia.
Abraham fue justificado por la fe, pero esa fe se expresó al ofrecer a Isaac (v.21). Rahab creyó, y por eso protegió a los espías (v.25). No eran perfectos, pero su fe estaba viva y se manifestó en decisiones concretas.
Así también nosotros: ¿cómo mostramos que creemos en Jesús? ¿Qué obras están revelando nuestra confianza en Él?
¿Qué evidencias visibles en mi vida demuestran que mi fe es viva y confiada en Dios?
Acerca de este Plan

La carta de Santiago (2:14-26) no es un tratado doctrinal abstracto, sino una exhortación práctica al cristianismo auténtico. En estos versículos, el autor confronta una fe estéril, una que se proclama con palabras, pero no se manifiesta en acciones. ¿Puede esa fe salvar? ¿Nuestra fe está viva o muerta? No se trata de hacer obras para ganar salvación, sino de vivir una fe que, por ser verdadera, produce indefectiblemente frutos visibles.
More
Nos gustaría agradecer a Arnoldo Arana por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: leadershiftglobal.com
Planes relacionados

Los Hombres Después Del Aborto: El Camino a Seguir

La Fe No Hace Acepción De Personas

Fe que humilla, une y transforma

Amor en Acción

Ebenezer - Hasta Aquí Nos Ayudó Jehová 5.0

Fruto, raíz y corazón: Lo que llevas dentro sale afuera

El Poder Del Evangelio

La Dirección Divina – Una Brújula

¿Cómo Puedo Saber Si Mi Sueño Proviene De Dios?
