Padres y Madres: Devociones del Ministerio Tiempo de GraciaMuestra

Padres: Trátela bien

"Si la mamá no es feliz, nadie es feliz". Esa frase suena tan cierta que parece como si hubiera sido tomada de la Biblia . . . quizás de 2 Ezequías, ¿o de la Epístola a los mesopotámicos?

Bueno, tal vez no. Sin embargo, esposos, seamos honestos, no hay desdicha como la de estar esposado a una mujer desdichada. ¿Está de acuerdo? Las mujeres pueden ser un poco más débiles físicamente que sus maridos, pero sus emociones y estados de ánimo son lo suficientemente poderosos como para dominar toda la casa.

La clave es cómo la trata el hombre; el apóstol Pablo escribió: “Así también los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama” (Efesios 5:28). Las mujeres cristianas aman a Jesús: él las escucha en su dolor y en sus aflicciones, siente su dolor y sus aflicciones, y también lleva su dolor y sus aflicciones. La mujer que tiene un esposo en quien puede confiar, que la ama como la ama Jesús, que le abre el corazón para que ella comparta con él sus frustraciones, es una mujer que está en paz.

Señores, si ustedes les sirven y satisfacen sus necesidades, su vida será mucho mejor. Cuando mamá está feliz, todo el mundo es feliz.