Darlo TodoMuestra

Lo que hacemos por otros, lo hacemos para Dios.
Es gratificante ver cómo todo se trata de Jesús, de su amor, de su obra y de la manera en la que nos permite ser partícipes de ella. Aún siendo imperfectos, somos templo de un Dios perfecto, lleno de amor, compasión y misericordia que obra a través de nuestras manos y pies en este mundo, permitiéndonos verlo a través de las personas y dar de lo que Él ya nos ha entregado en abundancia. Pedro, en una ocasión, junto con Juan, subían al templo cuando un hombre cojo de nacimiento les pidió limosna. Pedro lo miró y le dijo que no tenía dinero, pero le ofreció algo mucho más poderoso: sanidad, mediante el poder que Jesús había puesto en él.
Jesús nos inunda de él y de sus bendiciones para que nosotros podamos ser vaciados totalmente en otros. Mientras más llenos seamos de Jesús, más veremos a los demás como Jesús los ve, daremos de lo que hemos recibido y dependeremos totalmente de Él.
Oración
Mi Jesús, gracias por ser mi porción, por ser el gran YO SOY en todo tiempo. Gracias porque en ti encuentro mi identidad y todo lo que necesito, tú eres quien me sacia, en ti todo tiene propósito. Gracias por habitar en mí, amado Jesús, lléname de tu compasión y úsame diariamente para ser tus manos y pies en este mundo. Úsame para ser una oración respondida y que el mundo entero se llene de eterna gratitud porque las personas saben y prueban de ti, se sienten vistas y amadas a través de que tú me usas para bendecir a tus hijos.
Aplicación
Hoy piensa en esta frase y ora pidiéndole a Dios que te ayude a ponerla en práctica:“Hoy mi forma de amar a otros será mi manera de adorar a Dios”. Mira cómo cada necesidad descrita por Jesús en el versículo de hoy fue cubierta de manera efectiva: el que tenía sed tuvo qué beber, el que tenía hambre tuvo qué comer y el que estaba desnudo fue abrigado. Esto nos invita a caminar día a día con ojos abiertos e identificar de manera intencional las necesidades que nos rodean y tener la oportunidad de ser usados por Dios para bendecir a los demás.
Escrituras
Acerca de este Plan

Dios dio primero, y desde esa abundancia somos llamados a dar. Dar con gozo, sin esperar nada a cambio, desde cualquier lugar y con lo que tengamos en las manos. Servir como Jesús, con humildad y compasión, entendiendo que todo lo que hacemos por otros, lo hacemos para Él. Porque cuando entregamos, Dios multiplica, transforma corazones y nos permite ser parte de algo eterno mucho más grande que nosotros mismos.
More
Nos gustaría agradecer a caminodevida por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: caminodevida.com
Planes relacionados

Fundamentos: Una Vida Saludable Con Dios.

Amistad Que Edifican Y Fortalece

Reformación | Devocional De 7 Días

Fe Como Un Grano De Mostaza

Resentidos en Silencio: Cuando La Enfermedad Sacude La Fe

Conocer a Dios: Desde El Edén Hasta La Eternidad

5 Claves Para Liderar Con Madurez: Convierte Tu Influencia en Impacto Duradero

Sirviendo a Dios

Aliento Para Las Mamás en El Día De Acción De Gracias
