Adoración | Devocional De 7 DíasMuestra

El Fuego Limpiador

Tienes la opción de adorar a Jesús o al mundo. Es imposible amar a ambos al mismo tiempo. Es por eso que Jesús dice: "Si tratas de aferrarte a la vida, la perderás, pero si entregas tu vida por mi causa, la salvarás" (Mateo 16:25 NTV). El mundo enseña placer propio y consuelo, mientras que Jesús enseña autonegación y resistencia. El mundo satisface los deseos temporales, mientras que Jesús promete recompensas y vida eternas. Entonces, ¿qué haces cuando deseas amar a Dios pero te encuentras ocupado y amando cosas mundanas?

En Isaías 6, el profeta Isaías comparte una poderosa revelación de la santidad de Dios que corta su corazón. Mientras es testigo de la majestuosidad y santidad de Dios, un serafín viene y le toca la boca con un carbón de fuego y lo limpia. Una de las maneras más rápidas de pasar de adorar las cosas de este mundo a adorar al Rey de Reyes es obtener una nueva revelación de Su santidad: cerrar los ojos con Dios y verlo en Su plenitud.

A medida que alabas y adoras al SANTO, al PURO y al PERFECTO, Él bendecirá tus santos deseos de amarlo y servirle. Comenzarás a parecerte a Él y a actuar como Él mientras lo adoras. Tú fuiste creado a su imagen, para adorarlo solo a él, no a las cosas de este mundo. Tómate un tiempo hoy para evaluar las cosas que amas en tu vida. ¿Cuáles reflejan Su reino, el deseo piadoso? ¿Cuáles reflejan los deseos de este mundo?

Oración

Señor, tú eres Santo, Santo Santo. No hay nadie como tú. ¡No hay nadie ni nada más que merezca mi adoración excepto tú! ¡Tienes todo mi amor y todo mi corazón, Dios! No hay nadie más que merezca tanto mi adoración como tú, Rey Jesús. Gracias por tu gran amor. Te adoraré con todo lo que soy. Amén.

Aplicación

¿Qué es lo que más adoras? ¿Qué tiene tu corazón? ¿Qué amas? Pídele a Dios que purifique lo que amas y adoras, y te dé sus deseos.

Pide una nueva revelación de la Santidad de Dios mientras adoras. Sólo declara una y otra vez "¡Eres Santo, Santo, Santo!". Hasta que caiga la revelación de su santidad.