Ama Sin LímitesMuestra

EL AMOR MÁS GRANDE TIENE FORMA DE CRUZ, ASÍ ES COMO NOSOTRAS TAMBIÉN AMAMOS A OTROS: SACRIFICIALMENTE

En este tiempo, la palabra «sacrificio» es una ofensa para las personas. Es como si les pidiéramos que se rebajaran a un nivel que no les agrada, por lo tanto, se rehúsan a cualquier sacrificio que no sea para su beneficio. Sin embargo, el amor de Dios reflejado en la vida de sus hijos e hijas es diferente, o al menos, debe serlo.

Nuestros corazones están esperando la siguiente historia romántica y llena de emociones, detalles y alabanza. Más de alguna, no está esperando romance, sino estabilidad y, ¿por qué no?, una aventura sin límite. Y si no lo tenemos, entonces pasamos a lo siguiente o al siguiente. El amor de Cristo no fue así. Él no nos amó porque nosotras le dimos algo a cambio o porque hicimos tanto que ganamos su corazón. Él no nos debe nada, nosotras le debemos todo. Aun así, se sacrificó por obediencia a su Padre por nosotras en una muerte terrible, dolorosa, vergonzosa y realmente injusta: muerte de cruz (Fil 2:8).

¿Cómo pagamos por tan grande amor? Obedeciéndolo. Y Él dice que, si somos sus hijas por la fe, nos está transformando a la imagen de su Hijo (Ef 4:24). ¿Amas como Cristo te amó y te ama? ¿Su sacrificio resuena en tu corazón y repercute en tus relaciones? ¿O acaso te sientes lejana a este amor y no causa en ti efecto alguno? No necesitas buscar un amor más grande que el que ya tienes en Cristo Jesús. No solo Él es fiel, sino que te ama incondicionalmente al no dejarte en tu pecado, sino transformándote a Él.

El más grande amor que podemos recibir y por el cual no hicimos nada para merecerlo tiene forma de cruz. Y tiene forma de cruz porque nuestro pecado ha sido horrendo. Sin embargo, ni siquiera ese pecado detuvo a Dios de amarte al entregar a su único Hijo por ti. Querida hermana, no hay excusa para no amar a otros, no hay excusa para decir que solo amamos a Dios, pero no a nuestros hermanos. Nuestro amor se puede ver de maneras diferentes, como evitar murmuración, perdonar, preguntar antes de asumir, etc., no tienes que mostrar emoción ni euforiacon todo el mundo, lo que quiero dejar en tu corazón es que no guardes rencor, enojo ni dolor en tu corazón contra alguien, esto te impedirá amar como Jesús te ha amado, te lo ha demostrado y lo seguirá haciendo hasta la eternidad.

• Aprende: ¿Reconoces que Jesús es el amor más grande de Dios para ti? ¿Cómo se ve en tu diario vivir?
• Vive: Lee Romanos 5:8-11 y escribe con tus palabras lo que estos versículos te enseñan del amor a Dios. Luego, lee 2 Corintios 5:18-20 y responde: ¿Cuál es tu misión a través de la verdad del amor de Dios para con otros?
• Lidera: Comparte con alguien no creyente este devocional y preséntale el amor de Cristo.

Oración

Señor, te damos gracias por tu amor en forma de cruz, por la esperanza que tu resurrección nos da. Gracias por la bendición de tenerte y ser tuyas. Gracias porque no nos dejaste condenadas en nuestro pecado ni viste nuestra inmundicia, sino que nos diste tu justicia y tu misericordia. Nos salvaste, Señor. Ayúdanos a no olvidar este regalo todos los días para que moldee nuestra forma de vivir con otros. Amén.

Descarga recursos bíblicos GRATIS en www.reformadas.com