[La sabiduría de Salomón] Estoy enojado contigoMuestra

Interpón espacio y tiempo

¿Alguna vez has deseado poder borrar lo que dijiste durante una discusión? El momento estaba tan acalorado y había tanta emoción que dijiste algo que dejó una cicatriz en la persona que amas. A todos nos ha pasado eso. Y, ya sea que lo hayamos dicho en voz alta o para nosotros mismos, lo que dijimos jamás se podrá borrar.

Salomón se encontraba en esa situación. Quería saber si había tiempo para ellos esa noche, pero ella estaba demasiado cansada. Ella le dijo todas las razones, y ¿qué hizo Salomón? ¿Azotó la puerta o le gritó? ¿Le dijo todas las razones por las que no era justo? Nada de eso. Salomón puso mirra en la manija. ¿Qué simboliza? La mirra simboliza amor. No golpea la puerta, no insiste en llamar a la puerta ni la hace levantarse para abrirla. No. Deja amor en la manija. Sabe que el momento no es el adecuado. Abre la ventanilla, pone amor en la manija y se retira.

Ningún conflicto se resuelve levantando la voz. Nadie termina agradecido después de gritarle a la persona que ama, y es porque hacerlo no resuelve nada. Salomón con sus acciones le dice a su esposa que no quiere reaccionar de una manera no santa, sino que quiere darle un poco de espacio y de tiempo, y así, sin duda, mostrarle que la ama. Por lo general, en el conflicto, nuestra respuesta inicial nunca es buena. Esto no significa que siempre tengas que salir de la habitación. Pero, si sabes que las palabras a punto de salir de tu boca no serán amorosas, es posible que necesites interponer tiempo y espacio para recordarte a ti y a tu cónyuge que lo amas. Esto ayudará a mostrarle a la otra persona que no estás tratando de ganar la discusión, sino que estás tratando de mostrar amor, sin importar cuán exaltado estés en ese momento. Por eso la Biblia dice que seamos rápidos para escuchar y lentos para hablar, de modo que seamos lentos en enojarnos. Cuando hacemos lo contrario, casi podemos garantizar que diremos algo que no queremos decir y perderemos la confianza de esa persona.

Asegúrate de que tus palabras edifiquen y que no derriben. Úsalas para reafirmar tu amor en lugar de usarlas para mostrar cuánta «razón» tienes. Interpón tiempo y espacio para lidiar con el conflicto, pero también asegúrate de no irte a dormir sin tratar con ese conflicto. La Biblia también es clara en que no permitamos que el sol se ponga sobre nuestro enojo. Salomón sabía que esa pelea no valdría la pena. Asegúrate de calcular el precio cuando entres en tu próximo conflicto.