Estoy aquí, SeñorMuestra

Ganas de aprender

Todos los educadores te dirán que nunca es demasiado tarde para aprender. Les encanta crecer en conocimiento y quieren alentar a las personas de todas las edades a adoptar la postura de ser aprendices de por vida.

Esto también es cierto para la Biblia. Quizás no fuiste bendecido con una escuela cristiana o escuela dominical en tu pasado, y otros niños se adelantaron tanto a ti que te diste por vencido. Nunca es demasiado tarde. No importa cuál sea tu edad, cultiva las ganas de aprender de la Palabra y deja que Dios te hable. "Señor, dame a conocer tus caminos; ¡Enséñame a seguir tus sendas! 5 Todo el día espero en ti; ¡enséñame a caminar en tu verdad, pues tú eres mi Dios y salvador!" (Salmo 25:4,5).

No establezca expectativas poco realistas. Algunas secciones son difíciles y requerirán algo de trabajo. Algunas cosas vendrán a ti con el tiempo. Algunas cosas tal vez nunca entiendas. Pero cuanto más leas, más cómodo te sentirás con el poderoso contenido de cada capítulo. Encuentra un buen maestro y sumérgete en lo que puedas. Encuentra un grupo en casa y estudia junto con otras personas. . .o forma un grupo por tu cuenta. Aprovecha las oportunidades de estudio de tu iglesia.

Cuanto más claro sea tu entendimiento de la Palabra, más fuerte será tu fe. Te darás cuenta de las mentiras de Satanás más rápidamente; puedes rechazar sus tentaciones y evitar sus trampas con la misma armadura poderosa que Jesús mismo usó: "Esto es lo que dice el Señor. . .".

Dilo conmigo: "Tengo ganas de aprender, Señor. Háblame".