La salsa: Busca primeroMuestra

La sabiduría divina
¡Cuando pedimos sabidudría, Dios nos escucha! Día tras día, nos enfrentamos a muchos retos y cuestionamientos; decisiones que debemos tomar. Algunas son pequeñas, y otras impactan significativamente nuestras vidas y la de quienes nos rodean. Todos actuamos desde nuestro libre albedrío para tomar decisiones basadas en muchos factores que pueden influenciar nuestras elecciones. Sin embargo, imaginemos un momento cuando no has tenido comprensión, información, o la perspicacia para tomar las mejores decisiones. La Biblia nos dice que cuando pedimos sabiduría, Dios responde generosamente, sin reproche. El Espíritu Santo es nuestro ayudador y benefactor, brindándonos conocimiento y orientación en la toma de decisiones. Hoy, le pedimos al Señor por Su sabiduría. Creemos que hay poder en la oración y en usar nuestra fe para bendecir a nuestros pastores y la comunidad. ¡Confiamos en la esperanza de cómo Dios responderá generosamente a estas oraciones brindándonos sabiduría y dirección!
Aplicación/ Reflexión:
- ¿Cómo has visto a Dios responder a tus oraciones cuando has buscado sabiduría?
- ¿A qué decisiones te enfrentas en las que necesitas la sabiduría divina?
- ¿Cómo puedes orar intencionalmente por la iglesia y por los que te rodean?
Oración:
Señor, agradezco que seas un Dios que escucha y responde generosamente a mis oraciones. Te pido sabuduría. Así como intercedo hoy por los pastores y la comunidad. Oro para que respondas prontamente a todos los que necesitan escuchar Tu voz. Te ruego, que cuando me hables, obedezca Tu voz por encima de todo. Espíritu Santo, te doy gracias porque eres mi ayudador, y me guiarás cuando no sepa qué hacer. Te invito a que entres en mi corazón y formes parte de mis decisiones hoy. Eres bienvenido aquí, haz lo que quieras. En el nombre de Jesús, oro, amén.
Acerca de este Plan

Durante los próximos 21 días, buscaremos a Dios primero. Al dedicar el comienzo de nuestro año a un tiempo de oración y ayuno, buscaremos la voluntad de Dios para nuestras vidas. En los próximos 21 días, la oración se convertirá en tu salsa y experimentarás una transformación genuina mientras buscas el Reino de Dios.
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