El Último Primer DíaMuestra

"SELECCIONA EL MEJOR RECURSO"

Mi hija tiene un poco más de 15 meses de vida. Aprendió a caminar y disfruta mucho de hacerlo. Cada vez que volvemos a nuestro departamento, e ingresamos al edificio, la escena se repite. Ella detiene su marcha, toma una piedrita del cantero del hall y al entrar en casa nos las entrega.  Las primeras veces que lo hizo, sonreíamos. Ahora intentamos de diversas maneras, que no preste atención a esto y continúe su marcha.

En cada desafío que se presenta hay dos cosas que nunca debemos perder de vista: Cuál es la meta y qué camino nos conduce de la mejor manera hasta ese lugar. Estar plenamente conscientes de esto nos ayuda a ser selectivos con aquellas “piedritas” que pueden aportar a la causa o convertirse en una severa distracción.

La situación que estaba atravesando Daniel no era sencilla. Cautivo en Babilonia, estrenando nuevo nombre y la noticia de que, desde ese momento, su régimen alimenticio se basaría en comida seleccionada para los dioses y el mismo rey. Esto atentaba de manera profunda contra sus convicciones. Lograron llevarlo cautivo, cambiar su nombre, pero no iban a lograr que su objetivo de agradar a Dios se detuviera. 

En medio de los procesos que atravesamos, hay momentos donde nos encontraremos frente a escenarios incómodos y tendremos que ser plenamente conscientes de que recurso seleccionaremos para nuestra vida. Tomar esa decisión, ¿me acerca o me aleja del objetivo planteado? ¿Me hará avanzar o al final logrará frenarme?  Las acciones que realizamos, ¿Contribuyen a mi camino o solo se están convirtiendo en una distracción más? Es entender que no puedo elegir el tamaño del gigante, pero si las armas para enfrentarlo.

No pierdas de vista la meta por unas cuantas “piedritas” en el hall de tu vida. No permitas que las distracciones le resten tiempo y fuerza a tu camino. El saber que no podemos elegir la dificultad a enfrentar, nos lleva a elegir muy bien los recursos para atravesar el problema. Hay una meta y un destino que esperan, no te desvíes del camino.