Eres conocido: 10 días para descubrir tu identidadMuestra

Tú ERES linaje escogido, real sacerdocio, nación santa. Este pasaje deja claro que no hay dudas sobre quién eres como seguidor de Cristo. ¡Has sido apartado! “Antes no eras un pueblo, ahora eres parte del pueblo de Dios. Antes no habías recibido misericordia, ahora has recibido su misericordia”. Una vez estabas ciego, ahora ves, gracias a su luz maravillosa. 

Pero no estás llamado a ser apartado sólo por el título. ¡No te detengas ahí! Ser apartado por Dios viene con un plan de acción. Estás llamado a abstenerte de las pasiones de la carne, de las cosas de este mundo que sabes que no están bien pero que al momento te resultan divertidas, porque estas cosas hacen la guerra a tu alma. Muy a menudo son ESAS cosas las que buscan definirte y abrir una brecha entre quién eres realmente (un hijo y una hija de Dios) y decirte que eres algo que te podría ser dado por un momento de reconocimiento, pero a la larga descubres que se trata de falsas identidades. Has sido llamado a una vocación más elevada que esa. No sacrifiques tu parte del sacerdocio real por una identidad temporal. 

Tú y yo estamos llamados a vivir honorablemente como seguidores de Cristo, no para que la gente te vea y piense que eres grandioso. Sino para que vean quién es Dios a través de ti, a través de tus acciones, tus palabras y la forma en que te comportas; no con arrogancia, sino con humildad. 

Así que, cuando hoy salgas por la puerta, recuerda quién eres. Cuando salgas con tus amigos, recuerda quién eres. Eres un linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por él. Y vive a partir de esa identidad. Dirige a la gente hacia Él. Comparte su luz y lo que Él ha hecho en tu vida. Y observa cómo te transforma de manera única en quien Él te ha llamado a ser.