Eres conocido: 10 días para descubrir tu identidadMuestra

¿Alguna vez te sientes a la deriva como una bolsa de plástico arrastrada por el viento? Es una broma. Pero hablando en serio, ¿te has sentido como el barro de estos versículos? Algo parecido. . . ¿Sin vitalidad ni propósito?

Prácticamente, el barro en sí mismo no tiene valor, es tierra del suelo mojada. Amorfo. Sin figura. Barro. Creo que a veces todos podemos sentirnos así. La incomodidad y la insatisfacción comienzan a infiltrarse en nuestro pensamiento cuando vamos por nuestra vida diaria buscando nuestro lugar con insensatez, esforzándonos por encajar y comprometiendo la moral o los estándares para sentirnos conocidos. Nosotros somos el barro.

El alfarero, sin embargo, es un artista experto. Tiene la paciencia y la visión para crear algo hermoso y útil hecho de barro. Cuando el alfarero se sienta frente a su torno para comenzar a crear algo nuevo, donde nosotros vemos un montón de tierra húmeda, él ve todo lo que necesita para trabajar. Sabe que algo hermoso saldrá de ello, por eso dedica su tiempo, añadiendo presión, formando algo único y maravilloso.

No puedo ser el único que a veces se pregunta: "¿Por qué Dios? ¿Por qué me dedicarías tiempo mientras sigo pecando contra ti y sigo siendo desobediente?" Sin embargo, lo hace. Él CONOCE tus defectos. Él SABE dónde eres débil. Él te CONOCE y Él me CONOCE. Cuando te sientas confundido o cuando las cosas se pongan difíciles, recuerda que Él es el Alfarero, que aplica presión para afinarnos, para nuestro bien y para su gloria. Mientras éramos barro inútil, a través de Jesús, ¡el Alfarero nos formó, y continúa formándonos, como algo hermoso! ¡Él te ha llamado para algo superior a ti mismo! No eres solo barro; eres arcilla en la mano del alfarero.