Las Buenas Noticias De Dios - Parte 1Muestra

¡Buenas noticias! Jesús, el pan de vida – Parte 1 

En el Antiguo Testamento, cuando Moisés le pregunta a Dios su nombre, Él le responde: “YO SOY EL QUE SOY... Así dirás a los hijos de Israel: YO SOY me envió a vosotros” (Ver Ex. 3:14), pues bien, seguro has notado que Jesús ha venido utilizando la expresión “YO SOY” a lo largo de este libro, de hecho, en este capítulo se identifica diciendo: “Yo soy el pan de vida” (V. 35).  

Versículos 22 al 26: Juan resalta el afán de la gente en encontrar a Jesús, pero ojo, no te confundas, ellos no querían encontrarlo para disfrutar de su compañía y escucharlo, ellos solo lo buscaban por pura ambición. Observa que cuando la gente pregunta a Jesús “¿cuándo llegaste acá?” (V. 25), Él no responde al interrogante, porque conoce sus corazones y sabe que ellos solo lo buscaban porque habían comido hasta quedar satisfechos en el milagro de la multiplicación (V. 26), y solo querían obtener algún beneficio material. A veces nosotros actuamos igual que está gente, vemos a Jesús como una especie de cajero que puede suplir nuestras ambiciones personales, y lo buscamos solo para obtener beneficios materiales, pero Jesús conoce nuestros corazones y no lo podemos engañar.  

Versículos 27 al 46: A todas esas personas que buscaban a Jesús por interés, Él les dice que deben preocuparse no tanto por “la comida que perece” (V. 27), sino  por la comida que dura y da vida eterna, y obviamente esa comida es Él mismo, puesto que más adelante se presenta como “el pan de vida” (V.  35), un pan que descendió del cielo (V.  33). 

¿Carro? Sí, ¿Casa? Sí, ¿Metas? Sí, pero debemos saber que todas esas cosas son pasajeras, y que no podemos hacer de ellas el todo en nuestra vida, en cambio, Jesús es eterno, y si creemos en Él y buscamos su rostro y no sus bolsillos, viviremos para siempre.   

 Jesús dijo: “Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás” (V. 35), Él es el alimento y el agua que necesita nuestra alma para tener vida eterna, y si morimos, entonces Él nos resucitará cuando llegue el fin del mundo (V. 39-40).  

¿Con que intención buscas tu a Jesús? ¿Estas mirando su rostro o sus bolsillos?  

Comentarios del Ministerio Juvenil Generación de Campeones: 

"La primera vez, Jesús se dirige a sus discípulos diciéndoles que Él es el pan de vida y que todo aquel que va a Él, NUNCA tendrá hambre, refiriéndose a la vida eterna. La segunda vez que se menciona, lo repiten en forma de murmuración algunos que tenían en poco a Jesús y le cuestionaban, pero el mismo Jesús, en su amor inagotable, recuerda por tercera ocasión que Él es el pan de vida y que los que cree en Él tiene vida eterna. La última vez que Jesús dice que es el pan vivo aclara que el pan que Él da es su carne, lo que nos recuerda el sacrificio de amor que DIOS hecho hombre, hizo en la cruz por nuestros pecados y que el que cree en esto vivirá para siempre." (Líder juvenil: María Estrada)