Un lugar en la mesaMuestra

¿Qué es la Mesa?

Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones.

Imagínate una mesa larga y bellamente preparada donde todos tengan asiento. Encuentras tu tarjeta de presentación y te sientas entre dos personas que nunca habías conocido antes. Los cubiertos relucen a la luz de los candelabros parpadeantes, mientras comienzan los lentos murmullos de conversación. Después de presentaciones incómodas, el pan se parte y se reparte. Pronto, comienza a fluir la risa y la conversación.

Mientras comes, la mujer francesa que está a tu lado cuenta una historia sobre el primer día de clases de su pequeña hija y cómo lloró mientras saludaba a su pequeña para que se fuera.

Durante el postre, el hombre de tu otro lado habla de crecer en Ghana, África Occidental. Dice que recuerda el olor de su hogar —cacao y humo de leña— y te dice cuánto lo extraña.

También compartes tu historia, y te resulta más fácil de lo que esperabas contar a dos extraños tus pensamientos y sentimientos, tus esperanzas y sueños.

Es raro, aunque los acaba de conocer, nadie aquí se siente como un extraño.

Esta es la mesa. Este es el reino de Dios en acción.

La Escritura es la hermosa invitación de Dios a toda la humanidad para que venga a Su mesa. A través de Jesús, tenemos un asiento en esta mesa, pero no porque nos lo hayamos ganado.

Efesios 2:8-9 nos recuerda "Dios los salvó por su gracia cuando creyeron. Ustedes no tienen ningún mérito en eso; es un regalo de Dios. La salvación no es un premio por las cosas buenas que hayamos hecho, así que ninguno de nosotros puede jactarse de ser salvo."

Aunque Dios envió la invitación a todos, algunas personas no saben que han sido invitadas a Su mesa. Ahí es donde entramos nosotros.

Te invitamos a explorar lo que significa ser parte del reino de Dios; cada día nos enfocaremos en las partes de un “centro de mesa” para una reunión muy especial. Y cada pieza simboliza las formas en que Dios nos ve participando en Su reino aquí en la tierra.

¡Levanta tu silla y comencemos!

Comida para el pensamiento:

• ¿Con quién te encantaría cenar?
• ¿Cómo se siente saber que te han invitado a la mesa del reino de Dios?
• Piensa en una persona en tu vida que aún no sabe que Dios la ama y la invita a la mesa. ¿Cómo puedes orar por ellos esta semana?

¡Estás invitado a la mesa de Dios! Ven y busca tu asiento en wycliffe.org/table.