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Hombres a prueba de tormentas IIMuestra

Hombres a prueba de tormentas II

DÍA 2 DE 9

Quiero que Dios elimine la tentación


Muchos eligen la segunda opción: quiero que Dios elimine la tentación. Pero este objetivo a menudo nos deja frustrados. Algunas fuentes de tentación están completamente fuera de nuestro control y si pedimos a Dios que elimine la tentación, queremos que cambie el mundo que nos rodea para hacernos la vida más fácil. Por supuesto, cuando esto no sucede, podemos responder decepcionados o frustrados porque Dios no nos rescató. ¿Observas egoísmo en esto? Dios necesita orquestar mi mundo para que no sea tentado.


Dios nunca promete eliminar las tentaciones. Pedir a Dios que elimine la tentación es una oración válida. El problema surge cuando esperamos que Dios elimine las tentaciones como si hubiera prometido hacerlo. Él prometió una vía de escape, pero nunca prometió eliminar las tentaciones. Entonces, si tu objetivo es «Quiero que Dios elimine la tentación», es probable que te sientas frustrado.


Quiero decir "no" a la tentación


La tercera opción parece excelente: quiero decir "no" cuando me tientan. Huir de la inmoralidad sexual, por supuesto, incluye decir "no" a la tentación sexual. Si pienso en ingresar a un sitio web inapropiado, o si permito que mis ojos permanezcan donde no deberían estar, o actuar de una manera que no sea bíblica, necesito decir "no". Necesito reconocer la tentación cuando llegue (¡y confía en mí, vendrá!) y luego rechazar ceder a ella.


Sin duda, este es un gran objetivo, pero también se queda corto. Este objetivo se mide solo por lo que no hacemos, «Soy sexualmente puro si digo “no” a una actividad sexual inapropiada». Las afirmaciones negativas como “decir no”, pueden motivar inicialmente el cambio, pero muchas veces traen frustración. Las negativas pueden iniciarnos en la dirección correcta, pero raramente mantienen un movimiento positivo hacia adelante. Recuerdo que cuando mis hijos eran pequeños y aparentemente siempre se metían en aprietos, mi conversación con ellos parecía consistir en solo tres palabras: «No... deténganse... déjenlo». Me sentía frustrado ya que parecía que siempre estaba enfatizando lo negativo. Las demandas negativas eran necesarias (después de todo, ¿qué padre quiere que su hijo coma grillos?) Pero, a largo plazo, también necesitamos algo positivo para reemplazar lo negativo. Necesitaba decirle a mis hijos algo como: «Deja de correr en la casa. En su lugar, ¡sal y corre por el jardín!» De la misma manera, necesito que mi objetivo de pureza incluya motivadores más positivos que solo la frase negativa, «no hagas esto».

Día 1Día 3

Acerca de este Plan

Hombres a prueba de tormentas II

Las tormentas, tentaciones sexuales, son inevitables y pueden destruir nuestra pureza sexual. Ser sexualmente puro va más allá de "no hacer" ciertas actividades. Uno experimenta la pureza en la medida en que toma decisio...

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Queremos agradecer al Dr. Roger Fankhauser, autor de Stormproof Men, Sexual Purity for Christian Men in a Sex-Saturated World (Grace Theology Press), en asociación con Grace School of Theology y El Centro Network por proporcionar este plan. Para obtener más información, visítenos en http://www.gsot.edu y http://www.elcentronetwork.com

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