»Por eso el reino de los cielos se parece a un rey que quiso ajustar cuentas con sus siervos. Al comenzar a hacerlo, se presentó uno que le debía diez mil monedas de oro. Como él no tenía con qué pagar, el señor mandó que lo vendieran a él, a su esposa y a sus hijos y todo lo que tenía, para así saldar la deuda. El siervo se postró delante de él. “Tenga paciencia conmigo —rogó—, y se lo pagaré todo”. El señor se compadeció de su siervo, perdonó su deuda y lo dejó en libertad. »Al salir, aquel siervo se encontró con uno de sus compañeros que le debía cien monedas de plata. Lo agarró por el cuello y comenzó a estrangularlo. “¡Págame lo que me debes!”, exigió. Su compañero se postró delante de él. “Ten paciencia conmigo —rogó—, y te lo pagaré”. Pero él se negó. Más bien fue y lo hizo meter en la cárcel hasta que pagara la deuda. Cuando los demás siervos vieron lo ocurrido, se entristecieron mucho y fueron a contarle a su señor todo lo que había sucedido. Entonces el señor mandó llamar al siervo. “¡Siervo malvado! —le dijo—, te perdoné toda aquella deuda porque me lo suplicaste. ¿No debías tú también haberte compadecido de tu compañero, así como yo me compadecí de ti?”. Y enojado, su señor lo entregó a los carceleros para que lo torturaran hasta que pagara todo lo que debía. »Así también mi Padre celestial los tratará a ustedes, a menos que cada uno perdone de corazón a su hermano».
Leer Mateo 18
Escuchar a Mateo 18
Compartir
Comparar todas las versiones: Mateo 18:23-35
3 Dias
David fue un rey que vivió conforme al corazón de Dios. Sin embargo, no era perfecto y cometió errores y pecados. Su secreto era un corazón genuino y arrepentido. Esta serie de 3 lecturas nos ayudará a ver que, al igual que David, nosotros somos imperfectos, pero ese no es el final de nuestra historia, sino la oportunidad de aprender y convertirnos en los hombres y mujeres que Dios quiere.
Vamos a ver otro regalo dentro de la gracia mirando lo que Jesús dice sobre el amor y el odio. Jesús dice: ama a tu prójimo, pero también ama a tus enemigos. ¿Cómo es amar a tu enemigo? Se parece mucho al perdón. Este plan te guiará a través de lo que Jesús dice sobre el perdón y, como hijos de Dios, cómo podemos elegir amar y perdonar a quienes nos han herido.
Perdonar es un acto de amor, gracia y misericordia, todos en algún momento de nuestra vida necesitamos perdonar y pedir perdón, pues todos fallamos. Dios mismo nos muestra su perdón día a día y sin duda este es el mayor acto de amor a la humanidad, aprendamos a perdonar como Dios nos perdona.
Una de las buenas noticias del Evangelio es que nuestra vida puede cambiar, no importa cómo haya empezado. Tu identidad no está definida por tu pasado. Jesús viene a rescatarte, para que tú puedas seguir adelante, continuar atravesando valles tenebrosos y salir de ellos.
¡Guarda versículos, lee sin conexión, mira videos didácticos y más!
Inicio
Biblia
Planes
Videos