Obra impulsada por el Evangelio en la criis de COVID-19Muestra

No se tu, pero hasta hace poco, siempre escuché Filipenses 6 y 8 como mandatos separados, en gran parte sin relación. Pero como vemos en la lectura de las Escrituras de hoy, están una detrás de la otra, separados solo por el versículo 7. ¿Podría ser porque parte de la solución a nuestra ansiedad se encuentra en lo que estamos eligiendo pensar?

Basado en el sentido común y nuestra experiencia colectiva trabajando durante la crisis de COVID-19, creo que la respuesta a esa pregunta retórica es un rotundo "sí". Pablo nos está ordenando que tomemos el control de nuestros pensamientos para que el Señor nos libere de nuestras ansidades.

Nuestro momento actual nos da un testimonio convincente de esta verdad. 

Las noticias de hoy no estan hermosas ni admirables. Lejos de ahi. Los titulares de hoy están llenos de miedo y ansiedad. 

Por supuesto que debemos estar informados sobre las cosas críticas que suceden en las comunidades que vivimos y las industrias en las que trabajamos. Pero eso no significa que tenemos que leer, mirar o escuchar las noticias durante horas y horas.

Si escuchas mi podcast, The Call to Mastery, es probable que me hayas escuchado hablar sobre el hecho de que consumo virtualmente ceronoticias: No cnn.com, no Twitter, no periódicos, no MSNBC o Fox News. Nada.

Pero por razones obvias, recientemente comencé a revisar sitios web de noticias para obtener información sobre directivas de auto-distanciamiento, cierres de escuelas, etc. Esta información fue muy relevante para mi vida y mi trabajo. 

Pero en la búsqueda de esa información importante, tropecé con las trampas que son la mayoría de los servicios de noticias modernos, escaneando titulares desde lo ridículo ("Hulk Hogan: 'Quizás no necesitamos una vacuna'") hasta lo que induce al miedo ("El número de muertos en Estados Unidos se acerca a 10,000”). Por supuesto, esta noticia (aunque ligeramente entretenida e informativa) no afecta mi vida ni mi trabajo en lo más mínimo.

Después de un par de días de habe regresado al consumo regular de noticias, estaba experimentando un nivel de ansiedad que nunca habia sentido antes. Después de reflexionar un poco sobre los versículos anteriores, el culpable me quedó claro. En lugar de llenar mi mente con más de la Palabra de Dios y recordatorios de sus promesas, estaba llenando mi mente con noticias en gran parte irrelevantes que me causaban ansiedad.

Tu y yo podemos ser los que nuestros ansiosos compañeros de trabajo y amigos buscan cuando necesitan esperanza durante estos tiempos difíciles. Pero no si nosotros mismos estamos ansiosos y nos olvidamos de la esperanza que tenemos en Cristo. Que seamos nosotros los que llenemos nuestras mentes con cosas que son “verdaderas, nobles, rectas, puras, hermosas, admirables, excelentes, [and] loable” para que la esperanza del evangelio brille hacia aquellos con quienes trabajamos y vivimos.

Si disfrutaste este plan de lectura, te encantará mi devocional semanal, que te ayudará a conectar más profundamente el Evangelio con tu trabajo. Regístrate aqui.