LEVÍTICO 19:19-37
LEVÍTICO 19:19-37 Reina Valera 2020 (RV2020)
Mis estatutos guardarás. No cruzarás ganado de diversas especies. Tu campo no sembrarás con mezcla de semillas. No te pondrás vestidos con mezcla de hilos. Si un hombre se acuesta con una esclava desposada con otro, que no ha sido rescatada ni ha recibido la libertad, ambos serán castigados, pero no morirán, por cuanto ella no es libre. Él ofrecerá al Señor, a la puerta del tabernáculo de reunión, un carnero como expiación por su culpa. Con el carnero de la expiación lo reconciliará el sacerdote delante del Señor, por el pecado que cometió, y se le perdonará. Cuando entréis en la tierra y plantéis toda clase de árboles frutales, durante los tres primeros años consideraréis impuros sus frutos, como si estuvieran incircuncisos, y no los comeréis. Al cuarto año, todos los frutos será consagrado en alabanzas al Señor. Y el quinto año podréis ya comer su fruto, y a partir de ahí será abundante. Yo, el Señor, vuestro Dios. No comeréis cosa alguna con sangre. No seréis agoreros ni adivinos. No haréis tonsura en vuestras cabezas ni recortaréis la punta de vuestra barba. No os haréis heridas en el cuerpo por un muerto, ni tatuaje alguno en la piel. Yo, el Señor. No contaminarás a tu hija convirtiéndola en una prostituta, para que no se prostituya la tierra y se llene de maldad. Guardaréis mis días de reposo y honraréis mi santuario. Yo, el Señor. No os volváis a los encantadores ni a los adivinos; no los consultéis, de manera que os contaminéis con ellos. Yo, el Señor, vuestro Dios. Delante de las canas te levantarás, y honrarás el rostro del anciano. De tu Dios tendrás temor. Yo, el Señor. Cuando el extranjero habite con vosotros en vuestra tierra, no lo oprimiréis. Como a uno de vosotros trataréis al extranjero que habite entre vosotros, y lo amarás como a ti mismo, porque extranjeros fuisteis en la tierra de Egipto. Yo, el Señor, vuestro Dios. No cometáis injusticia en los juicios, en medidas de tierra, ni en peso ni en cualquier otra medida. Tendréis balanzas, pesas y medidas justas. Yo soy el Señor, vuestro Dios, que os saqué de la tierra de Egipto. Cumplid todos mis estatutos y todas mis ordenanzas, y ponedlos por obra. Yo, el Señor.
LEVÍTICO 19:19-37 La Palabra (versión española) (BLP)
Guardad mis leyes. No cruzarás tu ganado con animales de otra especie; no sembrarás tu campo con dos clases de semilla ni te pondrás ropas de dos clases de tejido. Si un hombre se acuesta con una esclava que pertenece a otro y que aún no ha sido rescatada ni se le ha concedido la libertad, ambos serán azotados; pero no hasta la muerte, por cuanto ella no es libre. Él, por su parte, ofrecerá un carnero como sacrificio por su pecado y lo presentará al Señor a la entrada de la Tienda del encuentro. Ofreciendo el carnero como sacrificio de reparación, el sacerdote hará expiación por él en presencia del Señor y le será perdonado el pecado que cometió. Cuando entréis en la tierra y plantéis toda clase de árboles frutales, durante los tres primeros años consideraréis impuros sus frutos, como si estuvieran incircuncisos, y no los comeréis. El cuarto año todos los frutos serán consagrados al Señor en una fiesta de acción de gracias. Y el quinto año podréis ya comer su fruto y almacenar vuestras cosechas. Yo soy el Señor, vuestro Dios. No comeréis nada con su sangre. No practicaréis la adivinación ni la astrología. No os raparéis en redondo vuestras cabezas, ni os recortaréis la barba. No os haréis heridas en el cuerpo por un muerto, ni tatuaje alguno en la piel. Yo soy el Señor. No degradarás a tu hija entregándola a la prostitución, para que tampoco se prostituya la tierra y se llene de inmoralidad. Guardaréis mis días de descanso y honraréis mi santuario. Yo soy el Señor. No acudiréis a los nigromantes ni consultaréis a los espiritistas, contaminándoos con ellos. Yo soy el Señor, vuestro Dios. Te pondrás de pie en presencia de un anciano y lo tratarás con respeto; de esta manera honrarás a tu Dios. Yo soy el Señor. Cuando un extranjero resida en vuestra tierra con vosotros, no lo oprimáis; deberá ser considerado como un nacido en el país y lo amarás como a ti mismo, porque también vosotros fuisteis extranjeros en el país de Egipto. Yo soy el Señor, vuestro Dios. No procedáis injustamente en los juicios, ni en medidas de longitud, peso o capacidad. Tendréis balanzas justas, pesas justas y medidas justas. Yo soy el Señor, vuestro Dios, que os saqué de la tierra de Egipto. Observad todas mis leyes y todos mis mandamientos; ponedlos en práctica. Yo soy el Señor.
LEVÍTICO 19:19-37 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
“Pon en práctica mis leyes. “No cruces tu ganado con animales de diferente especie. “No siembres tu campo con diferentes semillas entremezcladas. “No te pongas ropas hechas con tela de materiales mezclados. “Si alguno se acuesta con una esclava destinada a otro hombre, pero que aún no ha sido comprada ni puesta en libertad, tendrá que pagar indemnización; pero no se les condenará a muerte, porque ella no es libre. El hombre presentará al Señor un carnero como sacrificio por la culpa, el cual llevará hasta la entrada de la tienda del encuentro. Con este carnero como sacrificio por la culpa, el sacerdote pedirá al Señor que perdone el pecado de ese hombre, y el pecado cometido se le perdonará. “Cuando entréis en el país y plantéis árboles frutales, no cortaréis ni comeréis sus frutos durante tres años. Al cuarto año, todos sus frutos serán consagrados al Señor en una celebración, y al quinto año ya podréis comer su fruto. Así el árbol os dará más. Yo soy el Señor vuestro Dios. “No comáis nada que tenga sangre. “No practiquéis la adivinación ni pretendáis predecir el futuro. “No os cortéis el pelo en redondo ni os recortéis la punta de la barba. “No os hagáis heridas en el cuerpo por causa de un muerto. No os hagáis ninguna clase de tatuaje. Yo soy el Señor. “No deshonres a tu hija convirtiéndola en una prostituta. No corrompas el país llenándolo de depravaciones. “Respetad mis sábados. Guardad reverencia por mi santuario. Yo soy el Señor. “No recurráis a espíritus y adivinos; no os hagáis impuros consultándolos. Yo soy el Señor vuestro Dios. “Ponte en pie y respeta a los ancianos. Sé reverente con tu Dios. Yo soy el Señor. “No hagáis sufrir al extranjero que viva entre vosotros. Tratadlo como a uno de vosotros; amadlo, pues es como vosotros. Además, también vosotros fuisteis extranjeros en Egipto. Yo soy el Señor vuestro Dios. “No hagáis trampa en la exactitud de medidas lineales, de peso o de capacidad. Usad balanzas, pesas y medidas exactas. Yo soy el Señor vuestro Dios, que os saqué de Egipto. “Así pues, poned en práctica mis leyes y decretos. Cumplidlos. Yo soy el Señor.”
LEVÍTICO 19:19-37 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
»Cumplid mis estatutos: »No crucéis animales de especies diferentes. »No plantéis en vuestro campo dos clases distintas de semilla. »No uséis ropa tejida con dos clases distintas de hilo. »Si un hombre se acuesta con una esclava prometida a otro en matrimonio, pero que aún no ha sido rescatada ni declarada libre, a los dos se les impondrá el castigo debido, pero no se les condenará a muerte porque ella aún no ha sido declarada libre. No obstante, el hombre deberá ofrecer al SEÑOR un carnero como ofrenda por su culpa. Lo llevará a la entrada de la Tienda de reunión, y el sacerdote hará expiación ante el SEÑOR por el pecado cometido. De este modo, su pecado le será perdonado. »Cuando vosotros entréis en la tierra y plantéis cualquier clase de árboles frutales, durante tres años no comeréis su fruto, sino que lo consideraréis inmundo. En el cuarto año todo su fruto será consagrado como una ofrenda de alabanza al SEÑOR, y en el quinto año ya podréis comer de su fruto. De este modo, aumentaréis vuestras cosechas. Yo soy el SEÑOR vuestro Dios. »No comáis nada que tenga sangre. »No practiquéis la adivinación ni los sortilegios. »No os cortéis el cabello en redondo ni os despuntéis la barba. »No os hagáis heridas en el cuerpo por causa de los muertos, ni tatuajes en la piel. Yo soy el SEÑOR. »No degradéis a vuestra hija haciendo de ella una prostituta, para que tampoco se prostituya la tierra ni se llene de perversidad. »Observad mis sábados, y tened reverencia por mi santuario. Yo soy el SEÑOR. »No acudáis a la nigromancia, ni busquéis a los espiritistas, porque os haréis impuros por causa de ellos. Yo soy el SEÑOR vuestro Dios. »Ponte de pie en presencia de los mayores. »Respeta a los ancianos. »Teme a tu Dios. Yo soy el SEÑOR. »Cuando algún extranjero se establezca en vuestro país, no lo tratéis mal. Al contrario, tratadlo como si fuera uno de vosotros. Amadlo como a vosotros mismos, porque también vosotros fuisteis extranjeros en Egipto. Yo soy el SEÑOR y Dios de Israel. »No cometáis injusticias falseando las medidas de longitud, de peso y de capacidad. Usad balanzas, pesas y medidas justas. Yo soy el SEÑOR vuestro Dios, que os saqué de Egipto. »Obedeced todos mis estatutos. Poned por obra todos mis preceptos. Yo soy el SEÑOR».