Logo de YouVersion
Icono de búsqueda

GÉNESIS 27

27
Ciclo de Jacob (27—36)
Isaac bendice a Jacob y Esaú#27,1-40: Este relato pone de relieve la gratuidad de la elección divina: el elegido del Señor no será Esaú, el hijo mayor, sino Jacob-Israel, el hijo menor (ver 32,27-28). Ver también Ml 1,2-3; Rm 9,10-13.
1Isaac era ya anciano y sus ojos se habían nublado tanto que ya no veía. Entonces llamó a Esaú, su hijo mayor, y le dijo:
— ¡Hijo mío!
Él respondió:
— Aquí estoy.
2Continuó Isaac:
— Como ves, ya soy un anciano y cualquier día me puedo morir. 3Quiero que vayas al monte con tu arco y tus flechas#27,3: tu arco y tus flechas: Lit. tus armas, tu aljaba y tu arco. y me traigas algo de caza. 4Después me lo guisas como a mí me gusta y me lo traes para que me lo coma, pues deseo darte mi bendición antes de morir#27,4: darte mi bendición: Lit. para que te bendiga mi alma. Esta es una expresión poética similar a la del Salmo 103,1.— antes de morir: Este y otros pasajes tales como 48,8-22; 49,1-28 o Dt 33 muestran el valor que se daba en el antiguo Israel a la bendición paterna, sobre todo a la impartida poco antes de morir. Como esta bendición debía ejercer una influencia decisiva en el destino de aquel que la recibía, Isaac quiere bendecir a Esaú, su hijo mayor y también su preferido (ver 25,28)..
5Pero Rebeca había estado escuchando lo que Isaac le decía a su hijo Esaú y, en cuanto este salió al monte a cazar algo para su padre, 6ella llamó a su hijo Jacob y le dijo:
— Según acabo de escuchar, tu padre le ha pedido a tu hermano Esaú 7que cace un animal y se lo traiga para hacerle un guiso como a él le gusta, y después le dará su bendición delante del Señor#27,7: le dará su bendición delante del Señor: La fórmula de bendición delante del Señor no es frecuente en el AT. En este caso se quiere indicar que la bendición será irreversible, pues se pronuncia delante del Señor, poniéndole a él como testigo y garante de la bendición. antes de morir. 8Así que ahora, hijo mío, haz lo que te mando. 9Vete al rebaño y tráeme dos de los mejores cabritos. Yo prepararé a tu padre un guiso como a él le gusta 10y tú se lo llevarás para que coma; y así te dará su bendición antes de morir.
11Pero Jacob replicó a Rebeca, su madre:
— Sabes que mi hermano Esaú es velludo y yo soy lampiño. 12Si resulta que mi padre llega a palparme y descubre que soy un impostor, me acarrearé maldición en lugar de bendición.
13Su madre le dijo:
— Caiga sobre mí esa maldición#27,13: … esa maldición: Fórmula para expresar que se aceptan la responsabilidad y el castigo si el plan falla. Ver 2 Sm 1,16; 3,29; Mt 27,25; Hch 5,28; 18,6., hijo mío. Tú haz lo que te digo y tráeme esos cabritos.
14Jacob fue en busca de los cabritos, se los llevó a su madre y ella preparó el guiso como a su padre le gustaba. 15Después Rebeca tomó la ropa de su hijo mayor Esaú, el mejor vestido que guardaba en casa, y se lo vistió a Jacob, su hijo menor. 16Con la piel de los cabritos le cubrió las manos y la parte lampiña del cuello, 17y puso en las manos de su hijo Jacob el guiso y el pan que había preparado.
18Jacob entró adonde estaba su padre y le dijo:
— ¡Padre!
Isaac respondió:
— Aquí estoy. ¿Quién eres tú, hijo mío?
19Jacob dijo:
— Soy Esaú, tu primogénito. Ya hice lo que me pediste. Ven, incorpórate para comer de lo que he cazado, y después me darás tu bendición.
20Isaac dijo a su hijo:
— ¡Qué pronto has encontrado caza!
Jacob respondió:
— El Señor tu Dios me la puso al alcance.
21Pero Isaac le dijo:
— Acércate, hijo mío, deja que te palpe para saber si de veras eres o no mi hijo Esaú.
22Y Jacob se acercó a Isaac, su padre, que palpándolo dijo:
— La voz es la de Jacob, pero las manos son de Esaú. 23Así que no lo reconoció porque sus manos eran velludas como las de su hermano Esaú. Ya se disponía a bendecirlo 24cuando volvió a preguntarle:
— ¿Eres tú de verdad mi hijo Esaú?
Jacob contestó:
— Lo soy.
25Entonces su padre le dijo:
— Sírveme de lo que has cazado, hijo mío, para que coma, y te daré mi bendición.
Jacob sirvió de comer a su padre, y comió; también le sirvió vino, y bebió. 26Después Isaac, su padre, le dijo:
— Acércate ahora, hijo mío, y bésame.
27Cuando Jacob se acercó para besarlo, Isaac le olió la ropa. Entonces lo bendijo con estas palabras:
“El aroma de mi hijo
es como el aroma de un campo
que el Señor ha bendecido.#Heb 11,20.
28Que Dios te conceda del cielo el rocío,
y de la tierra una abundante cosecha#27,28: una abundante cosecha: En el AT se considera la fecundidad como la manifestación más característica y apreciada de la bendición divina (ver 1,28; 49,25; Sal 128,3-4).
de vino y de trigo.
29Que tengas pueblos por vasallos
y naciones se inclinen ante ti.
Que seas señor de tus hermanos
y ante ti se postren los hijos de tu madre.
¡Maldito sea quien te maldiga,
y quien te bendiga, bendito sea!”.
30Apenas había terminado Isaac de bendecir a Jacob y de salir este de donde estaba su padre, cuando volvió de cazar Esaú, su hermano. 31Preparó también Esaú un guiso, se lo llevó a su padre y le dijo:
— Levántate, padre, come de esto que ha cazado tu hijo y dame tu bendición.
32Su padre Isaac le preguntó:
— ¿Quién eres tú?
Él respondió:
— Soy Esaú, tu hijo primogénito.
33Isaac se estremeció sobremanera y exclamó:
— Entonces ¿quién es el que fue a cazar y me lo trajo y comí de todo antes de que tú llegaras? Le di mi bendición, y bendecido quedará#27,33: bendecido quedará: En el antiguo Israel se consideraba que la bendición, al igual que la maldición, una vez pronunciadas, no podían ser revocadas ni traspasadas a otra persona. De ahí la angustia de Isaac y de Esaú (ver vv. 30-40)..
34Al oír Esaú las palabras de su padre, lanzó un grito atroz, lleno de amargura, y le suplicó:
— ¡Dame tu bendición a mí también, padre!
35Pero Isaac le respondió:
— Ha venido tu hermano con engaños y te ha robado tu bendición.
36Esaú exclamó:
— ¡Con razón le pusieron el nombre de Jacob! Ya van dos veces que me ha hecho trampa; primero me quitó mi primogenitura, y ahora me ha arrebatado mi bendición#27,36: me ha hecho trampa: Respecto de la relación entre el nombre Jacob y el vocablo trampa, ver 25,26.— mi primogenitura… mi bendición: Juego de palabras entre los vocablos hebreos que significan primogenitura y bendición, y que tienen un sonido semejante. Ver 25,29-34.. ¿No te queda otra bendición para mí?
37Isaac le respondió:
— Mira, lo he puesto por señor tuyo y he declarado siervos suyos a todos sus hermanos. Le he provisto de vino y trigo, ¿qué puedo hacer ya por ti, hijo mío?
38Pero Esaú insistió:
— ¿Es que sólo tienes una bendición, padre? ¡Bendíceme también a mí, padre mío#27,38: … a mí, padre mío! La versión griega de los LXX añade: Isaac guardó silencio.!
Y Esaú se puso a llorar y a dar grandes gritos.#Heb 12,17.
39Entonces Isaac, su padre, le dijo:
Vivirás lejos de la tierra fértil,
lejos del rocío del cielo.
40Vivirás de tu espada
y a tu hermano servirás.
Pero cuando te rebeles,
lograrás quitar su yugo de tu cuello#27,40: a tu hermano servirás… quitar su yugo de tu cuello: Posiblemente se esté refiriendo, por una parte, al momento histórico en que el territorio de Edom quedó sometido al dominio de los israelitas en tiempos de David (2 Sm 8,12-14); y por otra, a la época en que, durante el reinado de Jorán de Judá (848-841 a. C.), consiguió volver a ser del todo independiente. Una cierta independencia había logrado ya en los días de Salomón (1 Re 11,14-25)..
41Desde entonces Esaú guardó un profundo rencor hacia su hermano por la bendición que le había dado su padre, y se decía: “No está lejos el día en que hagamos duelo por la muerte de mi padre; después de eso, mataré a mi hermano Jacob.”
42Alguien contó a Rebeca lo que Esaú, su hijo mayor, estaba tramando; así que mandó llamar a Jacob, el hijo menor, y le dijo:
— Mira, tu hermano Esaú quiere matarte para vengarse de ti#27,42: quiere matarte para vengarse de ti: Otra posible traducción: se consuela pensando en matarte.. 43Créeme, hijo mío, debes huir en seguida a Jarán, a casa de mi hermano Labán.#24,28-29; 28,1-2. 44Quédate con él por algún tiempo#27,44: por algún tiempo: Lo que en principio iban a ser unos pocos días se convirtieron en veinte años. Madre e hijo no volvieron a verse nunca más, pues Rebeca falleció antes de que Jacob regresara., hasta que se apacigüe la furia de tu hermano. 45Cuando ya se haya calmado y olvide lo que le has hecho, entonces te mandaré aviso para que vuelvas. ¡No quiero perderlos a los dos#27,45: perderos a los dos: Si Esaú mataba a su hermano, tendría que huir lejos de su tribu o caer bajo la sanción conocida como “venganza de la sangre” (ver Ex 21,23-25; Nm 35,12). De ese modo, Rebeca perdería de una sola vez a sus dos hijos (Ver 2 Sm 14,6-7). el mismo día!
46Luego Rebeca dijo a Isaac:
— Estas nueras hititas me están amargando la vida. Como Jacob se case también con una de esas hititas, con una nativa de este país, ¡más me valdría morir!

Actualmente seleccionado:

GÉNESIS 27: BHTI

Destacar

Compartir

Copiar

None

¿Quieres tener guardados todos tus destacados en todos tus dispositivos? Regístrate o inicia sesión

YouVersion utiliza cookies para personalizar su experiencia. Al usar nuestro sitio web, acepta nuestro uso de cookies como se describe en nuestra Política de privacidad