Quien Dices Que Soy - Parte 3Muestra

Sabemos que al principio Dios creó todas las cosas. Las primeras personas que Dios creó fueron Adán y Eva. Dios plantó un jardín para el hombre y la mujer con árboles de muchos frutos y ríos caudalosos que regaraban las plantas. Adán y Eva comieron de la fruta que Dios había dicho que no podían comer, ellos le desobedecieron y de allí en adelante las personas quedamos separadas de Dios debido al pecado. A través de Adán la gente quedó bajo maldición y separada de Dios. Mucho tiempo después vendría otro hombre, un hombre que enderezaría el curso de la vida de las personas y la alinearía para ser una vida con Dios. ¡Una nueva vida! Dios envió a su hijo Jesús para que cargara con el peso y el castigo del pecado de la humanidad. Jesús es el Adán definitivo.

Esta es la razón por la que a veces Jesús es llamado “El último Adán”. El primer Adán nos separó de Dios y luego vino Jesús, el Adán definitivo, quien nos reconcilió y nos trajo de vuelta a los brazos de Dios. Jesús murió y resucitó para que nosotros pudiésemos ser perdonados y ser hechos nuevos. Así como Jesús murió y resucitó, cuando nosotros decidimos seguir a Jesús nuestra antigua forma de vivir nuestra vida ha sido enterrada y nos hemos levantado en una vida nueva con Jesús. El pecado nos separó de Dios, pero a través de Jesús somos hechos justos.

Lee el versículo de hoy acerca de lo que significa estar vivos junto con Cristo.