Quien Dices Que Soy - Parte 3Muestra

Cuando piensas en cómo Dios perdonó nuestros pecados, ¿alguna vez te has preguntado a ti mismo lo siguiente?: “¿Acaso esto significa que de ahora en adelante puedo hacer lo que se me dé la gana y luego simplemente pedirle perdón a Dios?” ¿Piensas que quizás el perdón de Dios te da un pase libre para hacer lo que quieras?

Pablo responde a esta pregunta en el libro de Romanos capítulo 6, ese es el capítulo que leeremos hoy. Estar vivo junto con Cristo significa que dejas el pecado atrás. El pecado ya no

reina libremente en nuestras vidas, estamos vivos junto con Cristo y nuestra vida pegada a la de Él significa que vivimos 100%, 24/7 una vida de lleno para Jesús. Cuando Jesús murió en la cruz tomó el castigo del pecado del mundo sobre sus hombros y nos libró para siempre, después se levantó de entre los muertos y derrotó a la muerte. Él no puede morir de nuevo, el pecado y la muerte ya no tienen poder. Es cierto que nosotros cometemos errores, no somos perfectos, pero a través de Jesús no vivimos una “vida llena de pecados”, nuestra antigua forma de vivir ha muerto. El pecado nos separa de Dios, pero a través de Jesús somos hechos limpios. ¡Estamos vivos en Cristo!

Lee los versículos de hoy y observa lo que Pablo dice acerca del perdón.