Àwọn Ẹsẹ Bíbélì Tí Ọ̀pọ̀ Èèyàn Mọ 1 Tesalonicenses 5

Pín

Estad siempre gozosos; orad sin cesar; dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para vosotros en Cristo Jesús.

Y que el mismo Dios de paz os santifique por completo; y que todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea preservado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo. Fiel es el que os llama, el cual también lo hará.

Mirad que ninguno devuelva a otro mal por mal, sino procurad siempre lo bueno los unos para con los otros, y para con todos.

Por tanto, alentaos los unos a los otros, y edificaos el uno al otro, tal como lo estáis haciendo.

Y os exhortamos, hermanos, a que amonestéis a los indisciplinados, animéis a los desalentados, sostengáis a los débiles y seáis pacientes con todos.

Porque no nos ha destinado Dios para ira, sino para obtener salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo

porque todos vosotros sois hijos de la luz e hijos del día. No somos de la noche ni de las tinieblas.