Àwọn Ẹsẹ Bíbélì Tí Ọ̀pọ̀ Èèyàn Mọ Génesis 11

Pín

Entonces dijo el SEÑOR: “He aquí que este pueblo está unido, y todos hablan el mismo idioma. Esto es lo que han comenzado a hacer, y ahora nada les impedirá hacer lo que se proponen. Vamos, pues, descendamos y confundamos allí su lenguaje, para que nadie entienda lo que dice su compañero”.

Y dijeron: “Vengan, edifiquémonos una ciudad y una torre cuya cúspide llegue al cielo. Hagámonos un nombre, no sea que nos dispersemos sobre la faz de toda la tierra”.

Por tanto, el nombre de dicha ciudad fue Babel, porque el SEÑOR confundió allí el lenguaje de toda la tierra, y desde allí los dispersó sobre la faz de toda la tierra.

Toda la tierra tenía un solo idioma y las mismas palabras.

El SEÑOR descendió para ver la ciudad y la torre que edificaban los hombres.

Así los dispersó el SEÑOR de allí sobre la faz de toda la tierra, y dejaron de edificar la ciudad.