Un Corazón Agradecido: Gracias en TodoMuestra

Es fácil dar por sentado lo que tenemos: salud, comida, un hogar, relaciones. Pero este salmo nos recuerda que debemos bendecir al Señor y no olvidar ninguno de Sus beneficios. La gratitud diaria comienza con reconocer las pequeñas (y grandes) bendiciones que Dios nos da. Hacerlo cambia nuestra actitud, nos llena de gozo y fortalece nuestra relación con Él.

El corazón agradecido se entrena, y cuanto más conscientes somos de los detalles del amor de Dios, más se despierta nuestra alabanza. Incluso en la rutina, Dios está obrando y su fidelidad se renueva cada mañana. Recordar Sus bondades nos ayuda a vivir con propósito y esperanza.

Preguntas para meditar:

• ¿Qué bendiciones has recibido hoy que podrías estar pasando por alto?
• ¿Cómo puedes incorporar la gratitud en tu rutina diaria?
• ¿Qué impacto tiene la gratitud en tu estado de ánimo y tu relación con Dios?

Oración:
Padre, gracias por cada bendición que derramas sobre mi vida. Ayúdame a no olvidar tus beneficios y a vivir con un corazón que siempre reconozca tu bondad. Amén.