Confiando en la Soberanía de DiosMuestra

La soberanía de Dios nos impulsa a adorar

Cuando reconocemos que Dios reina, surge espontáneamente en nosotros un espíritu de adoración. Saber que Él está en control nos libera del miedo… y nos lleva a exaltar Su nombre.
“Estad quietos” no significa quedarse inmóvil, sino detenerse interiormente y reconocer quién es Él: el Soberano del universo, el Señor de nuestra vida. La adoración es la respuesta más adecuada a Su soberanía. No adoramos porque todo va bien, sino porque sabemos que Él gobierna en todo.

Oración: Señor, hoy me detengo para reconocer que Tú eres Dios. Recibe mi adoración y sé glorificado en cada área de mi vida.