Las Cinco Solas: El legado de la Reforma continúaMuestra

Día 4: Solo para la gloria de Dios (Soli Deo Gloria)

En tiempos de la Reforma, los príncipes y obispos demandaban homenaje y veneración. Sin embargo, la Biblia enseña que el único digno de recibir nuestra adoración es Dios. Por lo tanto, todo lo que hagamos debe dar gloria al Señor, como se indica en 1 Corintios 10:31.

La Reforma no solo cambió la historia de la Iglesia, sino que devolvió al creyente el acceso directo a la Palabra de Dios, la certeza de la salvación por gracia mediante la fe, y la centralidad de Cristo como único mediador. Al recordar este legado, somos llamados a vivir para la gloria de Dios, con una fe que no depende de rituales humanos, sino de la verdad revelada en las Escrituras.

“Después de la oscuridad, la luz” no es solo un lema histórico, sino una invitación permanente a redescubrir la vida que el Evangelio ofrece.

Oración:
Señor, que todo lo que haga hoy y en el futuro sea para darte gloria. Ayúdame a no entregar mi corazón a otras cosas y a no perder nunca de vista que todo lo que tengo y todo lo que soy debo rendirlo a ti, mi Dios.