Somos Sus Atributos 21 Días Ayuno De DanielMuestra

CONSAGRACIÓN

La repetición es un elemento clave para alcanzar la excelencia en cualquier área de la vida, ya que nos ayuda a mejorar nuestras habilidades, aumentar nuestra eficiencia y confianza. Lo vemos en los deportes, cuando un atleta le dedica su tiempo, su fuerza, su mente a perfeccionar sus movimientos seguramente estará en los podios más importantes.

Daniel tenía un hábito repetitivo en su vida y era el de sacar espacios en el día para orar y buscar al Señor, la Biblia nos dice que el "solía hacer", era una costumbre, un momento irremplazable para él. Sin embargo, quiero que nos preguntemos, ¿lo importante es la repetición del hábito o el motivo que impulsaba la acción?

La consagración va más allá de repeticiones o rutinas que, aunque son parte significativa, no son lo más importante. Daniel comprendía que había sido separado para el plan de Dios y su motivo no era realizar solo una oración, sino el propósito en su oración, él tenía una necesidad que saciar, un deseo ferviente en su corazón para que Dios interviniera en su pueblo. Vemos en el capítulo 9 de Daniel: «Oh Señor, óyenos. Oh Señor, perdónanos. ¡Oh Señor, escúchanos y actúa! Por amor a tu nombre, no te demores, oh mi Dios, porque tu pueblo y tu ciudad llevan tu nombre».

Reflexionemos:

¿Cuál es el motivo o propósito de nuestra oración cotidiana?

¿Qué mueve nuestro corazón hoy, lo cual precise nuestra consagración?

Quiero invitarte a que puedas orar y meditar en aquellos motivos que el Espíritu Santo ha colocado en tu corazón. Seguramente hay una intervención de Dios para nuestra nación, nuestra ciudad, nuestra familia, nuestra iglesia local, quizás para alguna persona que conozcas, incluso para ti.

¡Dios quiere moverse en medio de una iglesia consagrada!