El Hoy Y El Mañana: Vivir en Humildad Bajo La Soberanía De DiosMuestra

La arrogancia de planear sin Dios

"¡Vamos ahora! los que decís: Hoy y mañana iremos a tal ciudad, y estaremos allá un año, y traficaremos, y ganaremos" (Santiago 4:13 RVR1960).

Planear sin Dios es construir castillos en el aire.

Santiago comienza denunciando la actitud arrogante de quienes hacen planes seguros y detallados, sin considerar la voluntad de Dios. La mentalidad de “hoy y mañana” refleja una confianza en el control humano que ignora la fragilidad y brevedad de la vida. No se trata de dejar de planear, sino de hacerlo con un corazón sometido a Dios.

La palabra “traficaremos y ganaremos” muestra la confianza en el éxito material, en el control absoluto sobre los resultados. Pero la Biblia nos recuerda que el futuro es incierto, y la soberanía es divina, no humana.

Este versículo nos llama a reflexionar sobre la raíz de nuestras decisiones: ¿Estamos confiando en nuestra habilidad, o en Dios? ¿Estamos reconociendo que Él es el dueño del tiempo y del futuro? La planificación es útil cuando se hace con humildad, sabiendo que nuestras vidas son un regalo temporal.

El error no está en planear, sino en hacerlo con autosuficiencia y sin dependencia de Dios. Santiago nos invita a un cambio radical en nuestra visión del control y la seguridad.

¿Tus planes reflejan confianza en Dios o en tus propias fuerzas y estrategias?