La Sabiduría De Dios: Locura Que SalvaMuestra

La sabiduría humana queda sin efecto ante Dios

"(...)Destruiré la sabiduría de los sabios, y desecharé el entendimiento de los entendidos" (1 Corintios 1:19 RVR1960).

Cuando la sabiduría humana se agota, la sabiduría de Dios comienza.

La sabiduría de Dios no es sabiduría del hombre multiplicada hasta el punto más alto; es sabiduría de un orden completamente diferente. Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos (Isaías 55:8-9). Santiago 3:13-18 también expresa esta verdad.

Dios ha elegido un camino que desarma los sistemas de pensamiento humanos. A través de la cruz, Él expone las limitaciones del orgullo intelectual y la arrogancia moral. Pablo cita a Isaías para reafirmar una verdad: la sabiduría de este mundo no tiene poder para salvar. Pero no se trata de despreciar el conocimiento, sino de entender que ninguna filosofía ni ciencia humana puede redimir el alma.

En un mundo que idolatra el razonamiento, Dios se revela en lo que parece contradictorio. La lógica humana busca grandeza, estatus y poder visible. Pero Dios obra en lo invisible, en lo humilde, en lo roto. Así, desactiva las estructuras mentales que se interponen entre el ser humano y su necesidad de gracia.

Este pasaje no nos llama a abandonar la razón, sino a someterla a la revelación. Nos invita a vivir con una fe que discierne lo espiritual más allá de lo aparente, que confía en que el plan de Dios —aunque no siempre comprensible— es perfecto, sabio y eficaz.

¿Estoy permitiendo que mis razonamientos y expectativas bloqueen la obra de Dios en mi vida?