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Resetear la Vida: ¿Qué Significa Arrepentirse de Verdad?

Jesús llegó con una noticia increíble: el Reino de Dios está aquí. Pero, acto seguido, nos suelta un "¡Arrepiéntanse!". ¿Qué onda con eso? ¿Acaso tenemos que sentirnos culpables todo el tiempo?

Arrepentirse no es andar con cara larga y autoflagelarse. No es como sentirte mal después de haberle gritado a una persona. Es mucho más profundo. Es como cuando tu celular se traba y tienes que reiniciarlo. Es un "reset" (reseteo) de tu vida.

Imagínate que estás jugando un videojuego y te das cuenta de que estás siguiendo la estrategia equivocada. ¿Qué haces? Cambias de estrategia, ¿no? Eso es arrepentirse: cambiar de dirección, de mentalidad.

Cuando Jesús nos dice que nos arrepintamos, nos está invitando a cambiar nuestra forma de pensar, a dejar de vivir de acuerdo a los estándares del mundo y a empezar a vivir de acuerdo a los estándares de Dios.

¿Alguna vez sentiste que no encajas, que estás viviendo una vida que no es la tuya? Eso es el pecado: vivir siendo quien no naciste para ser, hacer cosas que no naciste para hacer. Es como usar ropa que no es de tu talla, te sientes incómodo, y no te ves bien.

Las redes sociales nos bombardean con mensajes sobre cómo debemos ser, qué debemos tener, cómo debemos vernos. El arrepentimiento es decir: "¡Basta! Yo voy a vivir según lo que Dios dice de mí".

El pecado es una crisis de identidad. Es olvidar quiénes somos realmente: hijos e hijas de Dios. Arrepentirse es recordar nuestra verdadera identidad.

Arrepentirse es cómo actualizar el sistema operativo de tu vida. Es cambiar el "software" que te hace tomar decisiones equivocadas. Es cambiar lo que amas, poner a Dios en primer lugar.

Preguntas para la reflexión:

• ¿En qué áreas de tu vida sientes que necesitas un "reset"?
• ¿Qué "software" estás usando: el del mundo o el de Dios?
• ¿Qué significa para ti vivir siendo quien Dios te creó para ser?