The Chosen + Proyecto Biblia | Plan De Lectura De La Temporada 1Muestra

Sobrevivir versus vivir

¿Cómo sabemos si estamos vivos o muertos? ¡Revisando nuestros signos vitales! El latido del corazón, la respiración de los pulmones, el parpadeo de los ojos: esas son señales de vida. Pero, ¿qué pasaría si todos nuestros signos vitales se revisaran mientras nuestro corazón está lleno de miedo, ira u odio hacia uno mismo? ¿Podríamos mirar a dos personas que tienen cuerpos físicamente sanos y decir que una está totalmente viva mientras la otra apenas se aferra a la vida?

Sobrevivir no es lo mismo que vivir. Y todos compartimos el deseo de estar vivos plenamente. Sobrevivir es cuando vivimos solo de acuerdo con nuestra percepción sensorial: vista, gusto, olfato, tacto, sonido, etc. Usamos nuestros sentidos físicos para evitar lastimarnos y procuramos salud y seguridad. Eso es bueno, pero nuestros sentidos nunca nos cuentan la historia completa. Dios creó la humanidad para que funcionara de acuerdo con los sentidos físicos y sus instrucciones en conjunto. Ahí es cuando comenzamos a vivir de verdad.

Cuando actuamos de acuerdo con la voluntad y la instrucción de Dios, su propia vida comienza a fluir a través de nosotros. Cuando nos unimos a la corriente del Espíritu de Dios, el buen fruto del exuberante jardín del Edén comienza a crecer dentro de nosotros. El agua viva del Espíritu produce en nosotros amor, gozo, paciencia, bondad, mansedumbre y dominio propio. Esos son los caminos de Dios.

Cuando Jesús le dice a la mujer samaritana que el agua que ella bebía solo le iba a dar más sed, le sugiere que ella se había contentado con vivir en modo de supervivencia. Peor aún, el mundo la había lastimado tan profundamente que podía llegar a pensar que la supervivencia era lo mejor que podía experimentar antes de la muerte. Pero Jesús arrasa con esa forma de pensar. Él le promete que beber el tipo de agua que él da y vivir según sus caminos, producirá una "fuente" en su interior de la cual brotará un río interminable de vida abundante: una vida real, plena, hermosa y buena.

La historia de la Biblia no tiene que ver con que Dios nos ayude a sobrevivir el mayor tiempo posible. Es una historia sobre la intención de Dios de hacer que la humanidad viva plenamente, atrayendo a la humanidad a su vida, que ya es infinita y hermosa. Trascendamos las técnicas básicas de supervivencia para abrazar la vida en el camino de Jesús.

Preguntas para reflexionar

1) En esta escena, Jesús ignora las principales normas sociales para poder darle amor y esperanza pacientemente a la mujer samaritana. Como hombre judío, se suponía que debía ignorarla y evitarla, de acuerdo con las expectativas y los valores de los demás. ¿De qué grupos étnicos o religiosos de nuestro mundo nos han dicho que nos alejemos y por qué?

2) Jesús identifica la verdadera adoración a Dios en función de la sinceridad y la fidelidad a su enseñanza (arraigada en el Espíritu y la verdad), y no en función del lugar donde se realiza (en esta montaña o en aquella, en el templo o en otro lugar, etc.). Él dice que hay más de una forma de adorar y vivir para Dios, y que Dios ama toda la adoración sincera y en el Espíritu de Dios. ¿Eso nos enseña algo sobre la mejor forma de acercarnos a otras comunidades que honran a Dios con sinceridad, pero de forma diferente a nosotros?

3) Esta historia revela mucho sobre la naturaleza y el carácter de Jesús, sobre su humanidad y su compasión. ¿Qué más aprendiste sobre el carácter de Jesús a partir de la forma en que habla y actúa en esta historia?