¿Y si la obediencia no se siente bien?

Versículo clave:

“...El obedecer vale más que el sacrificio...” — 1 Samuel 15:22 (NVI).

Reflexión:

Obedecer, a veces suena a carga, a renuncia, a pérdida. Pero la obediencia en el Reino no es una imposición; es una respuesta. Es decirle a Dios: “Confío en ti, aunque no entienda del todo". Y eso no siempre se siente bien.

Muchas veces esperamos que obedecer sea fácil, que venga con entusiasmo y confirmaciones inmediatas. Pero Jesús mismo, en el Getsemaní, no se sintió bien al obedecer. Su oración fue clara: “Padre, si es posible, pasa de mí esta copa”. Sin embargo, terminó diciendo: “Pero no se haga mi voluntad, sino la tuya”. Esa es la obediencia que nace del amor y la confianza.

A veces Dios nos pide cosas que nos confrontan: perdonar cuando duele, renunciar a un plan que queríamos, callar cuando todo en nosotros quiere hablar. En esos momentos, descubrimos que obedecer no siempre es natural, pero sí profundamente espiritual.

Lo maravilloso es que cada acto de obediencia, por más pequeño que parezca, nos posiciona para experimentar más de Dios. La obediencia no es el fin, es el camino. Y al caminarlo, vamos siendo transformados.

La pregunta clave no es: “¿Se siente bien esto que Dios me está pidiendo?” Sino, “¿Estoy dispuesto a confiar en que su voluntad es mejor que la mía?”.

Hoy, tal vez Dios te esté hablando de algo concreto: una decisión que debes tomar, una conversación que has evitado, un paso de fe que te da temor. No lo ignores. El primer paso es el más difícil, pero también el más determinante.

La obediencia no siempre se siente bien. Pero siempre es buena. Y es el primer ladrillo en la construcción de una vida profunda, madura y llena del fruto de Dios.

Preguntas para reflexionar:

• ¿Estoy esperando sentirme cómodo para obedecer?
• ¿Qué me impide dar el primer paso hoy?

Acción para hoy:

Escribe una decisión o área donde Dios te está llamando a obedecer. Ora con honestidad: “Señor, no quiero posponer más. Ayúdame a dar este paso por fe, aunque no se sienta fácil”.