El Riesgo Del Amor Y La Belleza Del EvangelioMuestra

📅 Día 1 – Cuando el amor espera

El libro de Rut comienza presentando a su personaje principal, una viuda moabita. En tiempos de los jueces, una época de crisis espiritual, social y política, una familia de Belén —Elimelec, su esposa Noemí y sus dos hijos— se traslada a Moab buscando sustento. Allí, Elimelec muere, y sus hijos se casan con dos mujeres moabitas: Rut y Orfa. Diez años después, ambos hombres también fallecen, dejando a tres mujeres viudas y sin descendencia.

Ante la noticia de que había comida nuevamente en Belén, Noemí decide regresar. Orfa se queda en Moab, pero Rut se compromete con lealtad a acompañarla: “Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios será mi Dios”. Al llegar a Belén, Noemí expresa su dolor: “Yo me fui llena, pero el Señor me ha hecho volver con las manos vacías” (Rut 1:21 RVR1960).

En el capítulo 2, la necesidad más urgente es la comida. Rut sale a espigar en los campos y, por providencia divina, lo hace en el campo de Booz, un hombre bondadoso del clan de Elimelec. Booz nota a Rut y le muestra favor. Cuando Rut vuelve con gran cantidad de grano, Noemí se asombra y reconoce que Booz es un pariente redentor: alguien que, según la ley, podría cuidar de ellas. Así, Rut continúa espigando en los campos de Booz durante toda la cosecha.

El capítulo concluye con una imagen de estabilidad, pero también de vacío. La comida está garantizada, pero la restauración familiar aún no ha llegado. Rut y Noemí siguen siendo viudas en una cultura donde eso significaba vulnerabilidad. Sin embargo, detrás de cada escena hay un Dios tejiendo redención, aún en el silencio y la espera.

🤔 Preguntas para reflexionar:

1. ¿Cómo reaccionas cuando sientes que tu vida está “vacía”?
2. ¿Eres capaz de reconocer a Dios obrando en medio de la espera?