Nuevas Y Mejores ConviccionesMuestra

Convicción #1: Soy responsable
Estoy convencido de que no soy una víctima, yo soy responsable
Hay una gran diferencia entre ser una víctima y abrazar la identidad de víctima.
El profeta Isaías nos muestra lo que Jesús vivió mientras estuvo aquí en la tierra. En Isaías capítulo 53 encontramos lo siguiente acerca de Jesús: “Fue despreciado y rechazado, hombre de dolores, conocedor del dolor más profundo…fue oprimido y tratado con crueldad, Él no había hecho nada malo, y jamás había engañado a nadie. Pero fue enterrado como un criminal”. Isaías nos muestra las circunstancias injustas que rodearon la vida de Jesús, pero también nos muestra el desenlace. Más adelante en el versículo 10 nos dice: “En sus manos (en las manos de Jesús) el buen plan del Señor prosperará”. A pesar de todo lo que vivió, Jesús nunca abrazó la identidad de víctima, nunca le abrió la puerta a las heridas emocionales, al rechazo, a la queja ni al enojo, al contrario, se hizo responsable de lo que Dios puso en sus manos. Y Jesús lo hizo en primer lugar para entendernos, pero también para dejarnos una poderosa promesa.
El autor de Hebreos nos dice lo siguiente acerca de Jesús: “Nuestro sumo sacerdote (Jesús), comprende nuestras debilidades, porque enfrentó todas y cada una de las pruebas que enfrentamos nosotros” (Hebreos 4:15-16 NTV). Jesús en obediencia renunció al cielo para descender a la tierra y vivir una vida rodeada de injusticias, para entender a todas y cada una de las personas que han sido víctimas en este mundo. Hoy quiero animarte con esta verdad: Jesús te entiende. Entiende cómo te sientes y cada uno de tus pensamientos, y Él quiere sanar tu corazón y renovar tus fuerzas.
Jesús también nos muestra su poder al dejarnos la siguiente promesa. En Juan capítulo 16 nos dice lo siguiente: “Aquí en el mundo tendrán muchas pruebas y tristezas, pero anímense, porque yo he vencido al mundo” (Juan 16:33 NTV). Ciertamente Jesús conoce la condición de este mundo, Él lo vivió de primera mano, y está consciente que tendremos pruebas y tristezas, pero por sobre todo nos dice: ¡anímate, porque yo he vencido al mundo! Mi amigo, en medio de lo que estamos viviendo, nuestra identidad debe estar puesta en Aquel que ya venció al mundo para siempre. La mejor manera de luchar contra la identidad de víctima es abrazando nuestra nueva identidad en Jesús, y cuando hacemos esto respondemos como Jesús respondió, siendo responsables con lo que Dios ha puesto en nuestras manos.
Hoy es un buen día para preguntarnos lo siguiente: ¿Qué es lo que Dios ha puesto en nuestras manos? ¿Hemos sido responsables al grado de que se cumpla el propósito de Dios en ello? Recordemos que la vida cristiana se trata de adquirir nuevas y mejores convicciones, las convicciones de Jesús, y Jesús fue un hombre responsable. Tomemos el reto de, sin importar la circunstancia en la que estemos, recordar que nuestra identidad está puesta en aquel que ya venció, para que un día se pueda decir de cada uno de nosotros que el buen plan del Señor prosperó en sus manos.
Hoy te animo a que profundicemos en las Escrituras desde esta perspectiva, y que oremos con autoridad tomando nuestra identidad en Cristo Jesús.
Escrituras
Acerca de este Plan

La vida cristiana se trata de adquirir nuevas y mejores convicciones. En estos próximos días vamos a profundizar en tres convicciones que vemos presentes en la vida de Jesús, convicciones que llevarán nuestra vida y relaciones al siguiente nivel.
More
Nos gustaría agradecer a Mauricio Ordoñez por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: www.instagram.com/mauordonezx
Planes relacionados

La Sabiduría De Dios: Locura Que Salva

En La Intimidad Del Corazón De Jesús

Descubriendo Quiénes Somos: La Identidad en Cristo que Todo lo Cambia

Serán Mis Testigos

Persevera en La Fe, Insiste en La Oración

Principios Espirituales Para Vivir en Familia

Fortalece Tu Fe #3 - Dios Salva

Vivir Con Propósito Y Sabiduría Considerando La Eternidad De Dios

Habacuc – Serie: Profetas
