Afilando mi espadaMuestra

Santiago capítulo 5 ofrece una reflexión profunda sobre la justicia de Dios y la responsabilidad cristiana, especialmente hacia los más necesitados. El autor denuncia la opresión de los ricos que acumulan riquezas a costa de la explotación de los pobres y les advierte sobre el juicio que les espera. A lo largo de este capítulo, también se exhorta a la paciencia y la perseverancia, recordando que el Señor es compasivo y misericordioso. Santiago anima a los creyentes a orar en todas las circunstancias, tanto en tiempos de sufrimiento como de gozo, y enfatiza el poder de la oración en la restauración espiritual.

Durante esta lectura, observa cómo Santiago está animando al creyente a comportarse justamente.

Santiago 5 nos invita a reflexionar viviendo una vida con comunicación abierta al Señor, haciendo mención de que la oración de una persona buena es muy poderosa porque Dios la escucha. Reflexiona que el pecado nos separa de Dios. Si confesamos nuestros pecados a Dios, Él es fiel para perdonar y limpiarnos, entonces podemos ser esa persona buena cuyas oraciones podrán alcanzar mucho. Dios te ama y se agrada cuando le buscas con todo tu corazón, alma y ser… que tu fe real sea manifestada a tu alrededor.