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Cómo superar la tentación

DÍA 1 DE 3

Todo el mundo se enfrenta a la tentación

A muchos de nosotros nos cuesta ver la diferencia entre la tentación de pecar y el acto de pecar. Nos sentimos tan culpables cuando nos tientan como cuando realmente pecamos. Pero hay una diferencia entre el pecado y la tentación, y es importante que lo sepamos, sobre todo si luchamos con sentimientos de vergüenza o desánimo cuando nos enfrentamos a la tentación. La verdad es que todo el mundo experimenta la tentación. Incluso Jesús experimentó la tentación (¡más sobre esto mañana!). Así es, como ser humano, Jesús (el Hijo de Dios) fue tentado a pecar. Pero, como nos dice Hebreos 4:15, fue «tentado en todo según nuestra semejanza, pero no pecó». Observa cómo este versículo distingue la tentación del pecado. Jesús fue tentado, pero no pecó. Al igual que Jesús, nosotros también podemos ser tentados y no pecar. El pecado no consiste en ser tentados; pecamos cuando cedemos a esa tentación.

El Enemigo puede intentar engañarte para que pienses que has pecado solo por haber sido tentado, para poder arrastrarte a pensamientos o sentimientos de vergüenza. No se lo permitas. Puede utilizar esos sentimientos de vergüenza para llevarte a actuar según tu pecado. Es como si dijera: «Ya has metido la pata al ser tentado, así que puedes actuar según esa tentación». Esto es una mentira y una astuta trampa. Recuerda que todos nos enfrentamos a la tentación, ya sea de nuestros propios deseos o del propio Satanás (¡por algo la Biblia le llama el tentador!). Lo que importa es lo que hacemos con esa tentación.

La próxima vez que te encuentres cara a cara con una tentación de pecar, date cuenta de que aún no has perdido la batalla. Aún queda una batalla por ganar. Puedes empezar a traer a tu mente Escrituras que te recuerden tu victoria en Cristo, invocar a Dios en la oración para que te ayude a hacerle frente a la tentación, o llamar a un amigo o mentor de confianza para que te anime y te haga rendir cuentas. No estás solo en tu lucha, y tampoco estás fuera de la lucha solo porque luches. Sé fuerte, sabiendo que Jesús se ha enfrentado a la misma lucha y que Él te llevará a la victoria.

Pensamiento del día: Lo que pienso sobre el pecado y la tentación importa. Experimentar la tentación no es pecado. Que peque depende de cómo responda a la tentación. Lucharé contra los pensamientos desalentadores que surgen al ser tentado, y me aferraré a la victoria que tengo en Cristo.

Día 2

Acerca de este Plan

Cómo superar la tentación

En nuestro peregrinaje de fe, nos enfrentamos a la tentación de desviarnos del camino y regresar a nuestra antigua vida. Nuestro "Sí" a Jesús se ve desafiado por los engaños y las trampas tentadoras del Enemigo. Entonces, ¿qué hacemos cuando llega la tentación? Este devocional nos ayuda a comprender la verdadera naturaleza de la tentación y nos recuerda el poder que tenemos en Cristo para vencerla.

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 Plan proporcionado por Ben Bennett y Resolution Movement. Resolution Movement ayuda a las personas a superar heridas y luchas con la verdad bíblica y la neurociencia, para que puedan prosperar. Para más información, visita: https://resolutionmovement.org/.