Lo Que ImportaMuestra

Desde que nos levantamos, estamos pensando en todo lo que tenemos que hacer. El trabajo, los hijos, las notas, la evaluación, las reuniones, la casa, las citas; las personas, los que otro piensan, que falta. Con solo pensar, nos cansamos. A diario, nos fatigamos solo con los pensamientos; con los sentimientos. Convertimos nuestras mentes en lagos sin nombre. Nos olvidamos de lo que importa. Pensamos en esos “detalles” que nadie más piensa. Nos volvemos impacientes, quejándonos todo el tiempo. Vemos todo lo que no está limpio, lo que esta mal. Hacemos una tormenta por cosas mínimas, que no importan y perdemos la visión. Nos olvidamos de lo que realmente importa.

En estos próximos días vamos a escudriñar lo que debe importar, desvaneciendo esos pensamientos que nos hacen comportar de una manera sin control, sin dominio propio. Poniendo lo que nos debe importar primero y dejando el resto en tercera. La palabra nos dice en Mateo 6:33 que busquemos el reino de Dios primero y todo lo demás será añadido. Primero Dios, luego la familia y luego el resto.