SERIE: LA SALVACIÓN - Arrepentirse de los pecados para ser salvos – IIIMuestra

“El Señor… quiere que todos se arrepientan” (2ª Pedro 3:9 NTV).
Después de oír el Evangelio y creer en Jesucristo, el siguiente paso hacia la salvación es el arrepentimiento. El arrepentimiento fue predicado por Juan el bautista (Mateo 3:2); por Jesús (Marcos 1:15; Mateo 4:17, 11:20-21) y por sus discípulos: “… Fueron por todas partes predicando a todos que se arrepintieran y se apartasen del pecado” (Marcos 6:12 CAS; Hechos 2:38; 3:19; 8:22; 20:21). A la iglesia que perdió el primer amor Jesús la exhortó: “Arrepiéntete…” (Apocalipsis 2:5); y a quienes eran causa de tropiezo les ordenó arrepentirse (Apocalipsis 2:16 y 21). La Biblia termina con un mensaje contundente para los tibios espirituales: “Arrepiéntanse” (Apocalipsis 3:3,19).
Ahora bien, el arrepentimiento es el mandamiento más difícil de obedecer porque implica cambio de vida. Jesús le dijo a los judíos: “Juan el Bautista… les mostró… la manera correcta de vivir, pero ustedes… se negaron a creerle y a arrepentirse de sus pecados” (Mateo 21:32 NTV). Los judíos no querían cambiar.
Nunca digamos que es fácil obedecer. Jesús no dijo eso. Al contrario, Él habló de cortarse la mano o sacarse el ojo en algunos casos (Mateo 5:29-30); de negarse a sí mismo (Mateo 16:24) y habló de renunciar a todo, aun a la propia vida (Lucas 14:33). Ser discípulo de Jesús nos cuesta todo: “Si ustedes consideran que su vida es más importante que obedecerme, no tendrán vida eterna. Pero si… me obedecen, entonces tendrán vida eterna” (Juan 12:25 TLA).
Cristo debe ocupar el primer lugar en nuestras vidas, todos y todo lo demás viene después (Mateo 6:33). Ser discípulo de Jesús requiere que nos alejemos completamente del pecado (Romanos 12:1-21) y que sometamos nuestra voluntad a la del Señor (Juan 12:25).
Jesús pide devoción de todo corazón, una lealtad a toda prueba, una negación completa de uno mismo, de modo que uno se ponga a sí mismo, su tiempo, su dinero, sus posesiones y sus talentos, a disposición de Cristo.
Escrituras
Acerca de este Plan

Dios es el único que puede salvarnos (1 Timoteo 1:15; Lucas 19:10). ¿Salvarnos de qué? Descúbrelo a través de esta SERIE.
More
Nos gustaría agradecer a José Luis Cinalli - Silvia López de Cinalli por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://iglesiadelaciudad.com.ar/
Planes relacionados

Descubriendo Quiénes Somos: La Identidad en Cristo que Todo lo Cambia

La Biblia… Luz en Mi Camino

La Vida Del Justo

La obsesión que destruye

Permanecer Cuando El Alma Quiere Rendirse

La Aventura de Seguir a Jesús

Jesús Al Centro: 6 Días Para Redescubrir Su Grandeza

Devocional Agosto "Lámpara a Mis Pies"

Fiel a La Misión
