DÍA 2: Acceso a Dios

Tomemos un momento hoy para estar con Dios. Si deseas hacer esto en familia, te recomendamos que reserves un tiempo después de tu propio tiempo con Dios para repasar juntos el contenido familiar que se encuentra en la parte inferior.

PAUSA
“Así que, hermanos, mediante la sangre de Jesús, tenemos confianza para entrar en el Lugar Santísimo por el camino nuevo y vivo que él nos ha abierto a través de la cortina, lo cual hizo por medio de su cuerpo. También tenemos un gran sacerdote al frente de la casa de Dios. Acerquémonos, pues, a Dios con corazón sincero y con la plena seguridad que da la fe, interiormente purificados de una conciencia culpable y los cuerpos lavados con agua pura.”—Hebreo 10:19–22 (NVI)

Ayer reflexionamos sobre la increíble verdad de que, en Cristo, tenemos pleno acceso a Dios. Hoy veremos algunas de las bendiciones que vienen con ese acceso.

Limpiados de una conciencia culpable: Hebreos usa la imagen del bautismo—“corazones rociados” y “cuerpos lavados”—para mostrar cómo Cristo nos ha purificado. En Él, somos limpiados y purificados del pecado.

La plena seguridad que trae la fe: La palabra griega para plena seguridad habla de completa confianza. Gracias a Jesús, nunca tenemos que dudar de nuestra posición ante Dios. Él nunca nos dejará a un lado. En lo más alto y en lo más bajo, Él está con nosotros.

REFLEXIONA

¿Estás cargando con culpa por pecados pasados ​​o presentes? No es necesario. Hoy, suelta esa carga y abraza la libertad y la paz de saber que estás perdonado. Confiesa tus pecados y confía en que “Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad.” (1 Juan 1:9 NVI).

ORA

Padre Celestial, confieso mis pecados y los pongo ante Ti. Gracias por Tu gracia y perdón. Ayúdame a caminar en libertad y acercarme más a Ti durante los próximos 20 días. Amén.

Para Tu Familia

PAUSA

Lee Hebreos 10:19–22 en voz alta con sus hijos. Ya sea que salgan a caminar, hablen en el auto, discutan durante la cena o se reúnan antes de acostarse, elijan un momento del día para discutir y orar juntos.

REFLEXIONA

Comparte esta idea principal con ellos.

• Jesús nos limpia para que podamos ser amigos de Dios.

Pregúntales:

• ¿De qué nos limpia Jesús?

ORA

Guía a tus hijos a orar usando estos puntos de oración.

• Agradece a Jesús por morir por nuestros pecados y permitirnos acudir a Él en cualquier momento.
• Pídele a Dios que te ayude a tomar las mejores decisiones posibles.
• Ora para que alguien que aún no conoce a Jesús lo conozca.

Ora esto por tus hijos:

Padre Celestial, confesamos nuestros pecados y los ponemos ante Ti. Gracias por Tu gracia y perdón. Ayuda a mis hijos (nómbralos) a caminar en libertad y acercarse a Ti. Amén.