Estoy AquíMuestra

"Oh Señor estoy aquí para cambiar"

Pedro cometió un gran error al negar a Jesús, pero lo que más me llama la atención de su historia es su disposición a reencontrarse con Él. En el versículo 7 se relata que "Cuando Simón Pedro oyó que era el Señor, se puso la túnica (porque se la había quitado para trabajar), se tiró al agua y se dirigió hacia la orilla".

Me pregunto qué hubiera hecho yo en su lugar, y creo que la mayoría de nosotros hubiéramos actuado de manera opuesta a Pedro. Cuando cometemos un error con alguien cercano, lo más natural es esquivar a esa persona la próxima vez que la vemos. Pensá en alguna discusión que no terminó bien por ejemplo. Si el error fue más grave aún, como haber traicionado a un amigo o familiar, lo más lógico sería escondernos y no dar la cara. Pedro podría haberle dicho a Juan (quien no había tenido ningún problema con Jesús) "Ve tú porque a mí me da vergüenza". Pero, lejos de eso, Pedro salió corriendo al encuentro con Jesús.

Creo que debemos aprender de la actitud de Pedro. Él no actuó impulsivamente, sino que sabía del amor que Jesús tenía. Había escuchado Sus enseñanzas sobre la parábola de la oveja perdida y del hijo pródigo, y sabía que para Jesús no había error que pudiera impedirle encontrarse con Él.

Hoy te invito a ser como Pedro. ¿Cometiste algún error o te alejaste de Jesús? No esperes a cambiar antes de acercarte a Él. Jesús está cerca tuyo, como lo estuvo de Pedro en la barca. No mandes a alguien más en tu lugar, sino sal corriendo a encontrarte con Él y dile: "Estoy aquí para cambiar". Él no va a rechazar tu solicitud.

¡No permitas que tus errores te alejen de Jesús! Aprende de Pedro y corre hacia Él.