Adviento: Redescubriendo la Navidad en el caosMuestra

Da con gozo

Durante la tercera semana de Adviento, nos centraremos en el GOZO.

Una de las cosas predestinadas a traernos gozo en esta época del año puede realmente robárnoslo: dar regalos. El caos en los centros comerciales, el estrés de encontrar "el regalo perfecto", y el impacto financiero de comprar tantos regalos al tiempo puede pasar la factura. Puede dificultar el ser un "dador alegre”.

Todos debemos decidir cuánto debemos dar. No obligues a nadie a dar más de lo que realmente desea dar, pues es a los dadores alegres a quienes Dios premia. Dios puede compensarte dándote todo lo que necesitas e incluso más, que no solo será suficiente para tus propias necesidades, sino que habrá de sobra para dar de manera GOZOSA a otros.
– 2 Corintios 9:7-8 (NVB)

El ánimo aquí es dar libremente, sabiendo que Dios se ocupará de tus necesidades como tú te ocupas de las de otros. (Y, honestamente, Pablo está diciendo que ni te molestes en dar si no lo haces alegremente.) Pienso que esto también se aplica al dar nuestros regalos de Navidad.

Te animo a considerar cómo puedes redefinir tu pensamiento sobre regalar, de tal manera que la búsqueda, el gasto o el sacrificio no te robe el gozo de esta temporada navideña. Hay algunas maneras en las que podemos mantener llenos de gozo al dar …

1 – Ora con propósito.

2 – Presupuesta de manera realista.

3 – Piensa creativamente.

Comienza orando con propósito. Para regalar con alegría es necesario un poco de planificación y esto comienza con la oración. Antes de incluso comenzar a comprar, realiza una estrategia. Pídele a Dios entendimiento de cómo podrías bendecir a cada persona incluida en tu lista de Navidad. Pide inspiración e ideas. ¡También puedes orar para que cada persona sea bendecida con regalos incomparables como esperanza, paz, gozo y amor en esta época de Adviento!

Luego, ejecuta un presupuesto realista. Aquí, el pasaje guía explícitamente a todos a "decidir cuánto debe dar”. Así que, planifica con anticipación. Decide con cuánto te sientes a gusto gastando, luego, apégate a ello para poder dar con gozo.

Por último, piensa creativamente. Algo muy útil que he descubierto es pensar en regalos únicos que tengan un significado más profundo y crear una mayor conexión, en lugar de artículos que se pueden comprar en una tienda. Te animo a contemplar cómo podrías dar este año un regalo original (que valga en todo sentido).

Por ejemplo, tal vez Dios te ha dado un talento especial que puedes compartir este año al hacer regalos personales de Navidad. Tal vez tienes destrezas y conocimiento para compartir. Tal vez lo más preciado que puedes ofrecer es tiempo de calidad. (Cupones para ir a tomar un café o arreglos para otras aventuras puede aumentar tu gozo no solo el día de Navidad, ¡sino el año que viene al pasar tiempo compartiendo con las personas que amas!)

La Navidad está a la vuelta de la esquina, así que toma un tiempo durante los siguientes días para planificar tus obsequios. Detente y piensa cómo puedes dar de manera diferente este año. Permite que Dios te guie hacia ideas de regalos originales que bendecirán a quienes amas. Y al haber orado, presupuestado y tenido la lluvia de ideas creativas, da generosamente, con alegría y con GOZO.